no te acerques a papá | renmin [NO EDITADA]

𝘀𝗲𝘀𝗲𝗻𝘁𝗮 :: 𝗻𝗼 𝘁𝗲 𝗮𝗺𝗼

- Señor Huang. - Llamó la enfermera acercándose a ambos.

Ambos se pusieron de pie.

- Felicidades, usted es el padre de un niño muy saludable. - Dijo la enfermera. - ¿Quiere pasar a verlo?

- Lléveme con él. - Respondió con nervios y al mismo tiempo con gran emoción. Renjun volteó con Jaemin. - Ven conmigo.

- ¿Qué? No, Señor, yo no puedo...

- No, si puede pasar. El niño está muy bien, así que no hay ningún problema. - Respondió la enfermera.

- Ahora no tienes excusa. - Dijo Renjun. - Ven conmigo.

Jaemin finalmente asintió con emoción. Le gustaban mucho los niños, más cuando eran bebés, le hacían recordar mucho a su bebé y a lo mucho que lo extrañaba.

Después de irse a poner el equipo necesario, la enfermera les indicó el camino y los llevó al lugar donde el bebé aguardaba.

La enfermera sacó con mucho cuidado al pequeño de la incubadora.

Renjun estaba muy ansioso por tenerlo entre sus brazos, pero quería que Jaemin sintiera lo que un día le negaron.

- Cárgalo. - Dijo Renjun extendiendo su mano a Jaemin.

- No... es su hijo... yo no puedo... - Dijo con inseguridad sobando sus brazos mientras retrocedía.

- Por favor, hazlo, yo te lo pido. - Dijo Renjun acercándose a él.

Jaemin miró al pequeño y después a Huang.

- ¿Estas seguro? Yo nunca he cargado un bebé. - Dijo con inseguridad.

- Bueno, entonces lo harás ahora. - Respondió Huang.

Jaemin asintió con miedo acercándose nuevamente.

La enfermera le indicó cómo debía de hacerlo y la posición para el menor.

- Es tan... bonito. - Susurró Na con una sonrisa y sus ojitos cristalinos mientras lo veía. Volteó con Renjun. - Mi hijo tal vez era igual de lindo...

- Y lo sigue siendo seguramente. - Respondió Renjun. - Tiene mucho que heredar.

Las mejillas de Jaemin se sonrojaron mientras éste volvía su mirada al pequeño.

- Su esposo sigue dormido, está débil, pero se pondrá bien. - Dijo la enfermera.

- Muchas gracias, pasaré a verlo antes de irme, tengo que ver a mis hijos y traer algo para mi hijo. - Dijo Renjun para después voltear a ver la escena que más lo cautivó. Jaemin le estaba hablando a su hijo haciéndolo gestos que lo hacían ver tierno y gracioso, se veía tan feliz.

Renjun no podía evitar pensar en si dolor cuando le dijeron que su hijo estaba muerto, el dolor que sintió, la rabia cuando supo la verdad, y la gran felicidad que sentiría cuando por fin lo encontrara.

🐰🦊

- Hyuck, dame más papel. - Dijo Jeno mientras pintaba un cuadro para su nuevo hermanito. - ¿Donghyuck? - Llamó nuevamente.

Donghyuck se encontraba sonriéndole a la nada.

- Hey. - Llamó Mark pasando su mano frente a él logrando que saliera de su trance. - ¿Qué te pasa?

El menor parpadeó un par de veces para después tallar sus ojitos.

- No sé... De repente me sentí muy feliz. - Respondió con una sonrisa en sus labios. - No sé cómo explicarlo, se siente bien, pero no sé porque me siento así.