Promised Land

Una oración a San Michael

"Lo siento mucho, Ranboo. Siento haberte arrastrado así ... "

Parpadea, despacio, desorientado. Su cabeza le da vueltas un poco, pero puede reconocer una sudadera con capucha verde neón en cualquier lugar.

"...¿Dream?"

No queda mucho de él. Le falta el brazo izquierdo, solo tiene un torso, una cabeza y un brazo derecho, pero está de pie. O flotando.

En realidad, están en una habitación. Uno grande. Parece de lo que Tommy habla cuando menciona un gimnasio escolar, aunque es un poco más pequeño, porque la mitad está derrumbado, pero hay muchos cadáveres de animales alrededor y un gran montículo de ...

Oh.

Oh, a Ranboo no le gusta maldecir, las Hermanas lo criaron específicamente para no tomar el nombre del Señor en vano, pero siente que Dios lo perdonaría porque de alguna manera está en la misma habitación que el maldito Rey de Dreamons.

Es grande, con extremidades que sobresalen de todas las direcciones. No solo cuatro extremidades normales, Ranboo puede ver brazos y piernas similares a los humanos que sobresalen de su espalda. Puede ver alas de pájaro, más pequeñas que el resto de su cuerpo, enrolladas. Tiene siete colas diferentes, pero no se mueve.

Una de las extremidades se cae del Rey, golpea el suelo con un gran golpe. Ranboo está tan contento de que no puede olerlo, pero de todos modos tiene náuseas por reflejo, mientras observa dos cosas horribles a la vez. La mancha vuelve a crecer la extremidad casi instantáneamente y la parte del cuerpo caída comienza a hincharse. Le crece otra extremidad, horrible, porque es otro par de brazos parecidos a los humanos, y los dos más, y forma un cuerpo y se escabulle, un dreamon recién creado.

"Ranboo, mira". La voz de Dream lo saca del horror. Se vuelve hacia el hombre, y ve a dos de ellos. Excepto que uno de ellos se está desvaneciendo de la existencia, y el otro está envuelto en brazos humanos de dreamon-gunk, retorciéndose alrededor de su cuerpo, manteniéndolo cautivo. Su pelo es un poco más largo y está más descuidado, su ropa está sucia por la mugre del cuerpo de los dreamon, y su cuerpo está inerte.

Respirando, pero inerte.

"Lo siento, no quería hacerte esto. Me estoy despertando, y no tengo mucho control sobre nada ahora mismo..."

Ranboo asiente, escuchando su parloteo. Mira a través de la apariencia de Dream a la vida real de Dream. Su máscara ha sido abandonada, y puede ver, a pesar de que ha estado dormido todo este tiempo (o, bueno, durante mucho tiempo), Ranboo puede ver lo delgado y cansado que está. No es como su forma de dormir se presentaría, pero puede ver cómo le hace una guerra mental y física.

Vuelve a echar un vistazo a la habitación, al dreamon. Es grande. Más grande que cualquier cosa que haya visto, no tan grande como los gigantes o leviatanes sobre los que ha leído, pero aún así, grande. La mayor parte de su cuerpo es una masa sólida de lo que sea que están hechas las criaturas, con las extremidades sobresaliendo en todos los ángulos, pero no parece que se mueva.

En absoluto.

Incluso ronca... él lo nota porque suena como el redoble de un trueno en medio de una tormenta, pero no se mueve. Salvo que las extremidades se desprenden de vez en cuando, y forman un dreamon, y es asqueroso pero no puede dejar de mirarlo.

Es como una abeja reina.

Sus recuerdos se remontan a una de sus lecciones en la escuela -una extraña clase de ciencias fusionada que repasa los aspectos básicos de las ciencias ambientales, una de las primeras clases de ciencias que ha tomado- y cómo uno de sus compañeros hizo un proyecto sobre las abejas. Lo anotó para contárselo a Tubbo, porque a Tubbo le gustan las abejas.