Aroma

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Jackson estaciono su automóvil en el lugar reservado para la familia Hale, reviso su reloj y aún tenía unos minutos para la reunión que tenían prevista, bajo de su Porsche, se inclinó y miro su reflejo en el cristal de la ventana, solo trataba de asegurarse que su expresión no reflejara su estado de ánimo.

—Honestamente nunca pensé que conocería a alguien tan vanidoso como yo —dijo Peter mirando su propio reflejo al lado de Jackson, que dio un respingo porque no lo había escuchado llegar—. No te culpo, no todos tienen el privilegio de verse así de bien como nosotros —dijo el mayor encogiéndose de hombros, el rubio sonrió de lado y lo siguió hasta su oficina.

—¿Y Derek? —pregunto el rubio cuando entraron y tomaron asiento.

—No vendrá y es mejor que no esperes que esté presente en los preparativos —dijo directamente Peter.

—Entiendo.

—Es mejor así, créeme.

—Solo me hubiera gustado hablarle de los avances para la recuperación de la propiedad en la reserva.

—Puedes decírmelo a mí, yo me encargare de hacerle llegar el mensaje. —dijo el mayor con un brillo ambicioso en la mirada.

Hablaron de temas legales y luego sobre la boda, contrataron un wedding planner para las nimiedades, pero había otras decisiones que no podían dejar a la ligera, pronto Jackson se dio cuenta que Peter tenía un gusto exquisito y en la mayoría de las decisiones coincidieron, además todo era más fácil gracias a su presupuesto ilimitado.

La tarde transcurrió rápidamente entre la elección de flores, de los trajes que usarían y el banquete que ofrecerían, casi se había olvidado de todos sus problemas mientras se imaginaba la boda perfecta, pero cuando llego a casa y se quedó solo en su habitación no podía dejar de pensar en Stiles, miro su reloj y ya pasaban de las 22:00 hrs. en ese momento el castaño debía estar cogiendo con Scott, dejo salir un suspiro frustrado, no podía creer que el muy cínico había usado la tarjeta de mejor amigo-casi hermano para ocultar su relación con el moreno.

Cerro sus ojos y visualizo el color whisky de los iris del castaño, los lunares que estaban salpicados en su pálida piel, podía evocar el aroma de su celo, y como su toque hacia que su cuerpo ardiera, el sabor su pene en su boca y el dolor ser separado por su dotado miembro, estaba tan caliente que no dudo en quitarse la ropa y acariciar su propio cuerpo imaginando que eran las manos del castaño las que lo recorrían.

Apretó la punta y movió su mano de arriba abajo por su propio eje, pero no era suficiente, humedeció dos dedos con saliva y los condujo a su entrada, le fue difícil encontrar una posición cómoda, pero lo consiguió y empezó a explorarse a sí mismo, se sentía bien, aunque no podía compararse en lo absoluto con lo lleno que lo hizo sentir Stiles, aumento la velocidad y lo desesperado de sus movimientos, imaginando al chico follándolo fuerte, diciendo su nombre y sin poder contenerse más termino manchando sus sabanas.

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La cena con su madre y Allison había resultado bien, por un momento Scott pensó que su madre, le haría un interrogatorio exhaustivo a la castaña, pero después de unas preguntas dejo de indagar, así que platicaron de temas triviales y comieron la deliciosa comida de Melissa y cuando terminaron ya había oscurecido, por lo que su madre le presto el auto y le dijo a Scott que llevara a casa la chica.

—Estoy segura que tu madre no nos creyó —dijo la castaña mientras el moreno conducía.

—¿Qué? Yo pensé que si...

—No pude pasar el primer filtro de preguntas, y aunque intente impregnarte de mí olor, estoy segura que ha detectado otro aroma en ti.

—Debe ser el de Deucalion... —dijo el moreno luciendo avergonzado.

Incompatibles (Stackson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora