Mensaje

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Isaac estaba acostumbrado a la forma en que su padre lo disciplinaba, parecía ser el único pasatiempo del Sr. Lahey, porque con los años se había vuelto creativo, siempre le decía que era su obligación como padre educarlo, pero por más que Isaac se esforzara por cumplir con sus obligaciones como hijo, el mayor siempre encontraba cualquier motivo para golpearlo.

Pero jamás había visto a su padre tan molesto, como hace unos días, lo encerró por horas en el refrigerador del sótano y cuando se cansó de llorar, lo tiro al suelo para patearlo tan fuerte que tuvo que faltar a clases por los dos días siguientes, porque era incapaz de caminar con normalidad, el motivo de esa última golpiza era por nacer como un omega, aunque Isaac no hizo nada para elegir ese destino, de alguna forma su padre lo culpaba por eso y le recordó lo débil que era, diciéndole que debió morir él, en lugar de su hijo mayor Camden y en eso tal vez Isaac estaba de acuerdo.

Su padre no lo molesto los días que se quedo en casa pero aun debía cumplir con sus obligaciones y el jueves su padre le dijo que no podía tomarse otro día y aunque aún sentía dolor, debía presentarse en la escuela antes que alguien notara su ausencia, el día anterior había ido al supermercado a comprar maquillaje para ocultar las marcas de los golpes y antes de salir por la mañana se observó en el espejo asegurándose que todas estuvieran perfectamente cubiertas.

Cuando llego a la escuela nadie le pregunto nada, no es como si tuviera muchos amigos y se preguntó si aun llegando con la piel morada alguien le hubiera dicho algo, tenía sentimientos encontrados por lo poco que importaba su vida, pero debía seguir con su rutina y fingir normalidad, tomo su equipo porque al final del día tenia Lacrosse, no es que le gustara el deporte pero a veces justificaba sus lesiones de esa forma, aunque cualquiera que prestara atención sabría que no estaba suficiente tiempo en el campo para lesionarse, guardo las cosas en su casillero y se quitó su playera atrás de Danny, sintió un ligero dolor en su espalda pero lo ignoro mientras se colocaba el uniforme.

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El día de su segundo celo, después de que los gemelos dejaran a Scott en su casa, el moreno se metió a su cama y aunque no podía dejar de pensar en la reacción de Deucalion estaba tan cansado que se quedó dormido, su madre tomo el turno de la noche y salió antes que ella volviera, así pudo evitar la conversación que seguro le esperaba, porque no estaba seguro si debía de hablarle a su madre de Deucalion hasta que el mismo aclarara un poco sus pensamientos.

Al día siguiente después de su primera clase corrió tras Ethan y Aiden en busca de respuestas, pero, aunque ellos le aseguraron que su padre no estaba molesto con él, no pudieron darle una explicación satisfactoria de porque se alejó tan repentinamente.

En la siguiente clase Stiles no retomo la conversación dónde fue interrumpida por Jackson, solo se ofreció a acompañarlo al hospital después de clases para que viera a algún doctor que le ayudara a regular sus ciclos.

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— Hey Isaac — dijo una voz y el rubio se giró sorprendido de escuchar su nombre — Te vi ayer en el supermercado.

— Eh... lo siento Stiles no te vi — dijo y el castaño achico sus ojos sin que creyera ni una palabra.

— ¿En serio? porque estoy muy seguro que te vi correr en cuanto te llame.

— Yo... no... — empezó el rubio, pero fue interrumpido por el castaño

— Escuche que mi padre recibió quejas de ruido en tu vecindario el lunes — agrego Stiles atento a sus reacciones, el chico palideció un poco y no quería presionarlo, pero había algo raro, Isaac siempre había sido distante, pero habían sido compañeros en la banca por más de dos temporadas así que no le era indiferente había notado que había faltado dos días y tenía una sospecha de lo que podría estar pasándole a Isaac que esperaba que no fuera cierta.

Incompatibles (Stackson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora