Voluntad Renaciente: El Capricho de Dios

Cap. 28: Chersh

Ha pasado un rato desde que Kire salió de la ciudad, se ha puesto a pensar en sus cosas durante el viaje, como que no sabe el nombre de la ciudad de donde viene, así que en caso de que se pierda no podrá pedir indicaciones, pero si recordaba el nombre del pueblo donde nació y creció, Dinivus, así que desde ahí podría volver a la ciudad.

El primer día de Kire viajando fue bastante tranquilo sin nada que hacer salvo estar alerta. Pero el segundo día todo cambio, estaban pasando por un bosque. Kire se sentía observado a cada pequeño galope que daban los caballos, los comerciantes estaban casi igual de intranquilos, ellos no estaban seguros de que un esbirro joven y de muy pocas escamas pudiera protegerles.

En ese momento los interceptaron unos 5 miembros de los Cuervos Negros por delante, deteniendo el avance de los caballos, Kire ya se había abalanzado contra ellos, sin ver que estaba totalmente rodeados, se escuchó una fuerte y gruesa voz que dijo –Formación Jago–

Las 5 personas de en medio se movieron haciendo que Kire falle su ataque, en ese momento un kunai de cuerda estuvo a punto de impactar en Kire, pero este coloco su antebrazo recibiendo el ataque con sus escamas, aunque se clavó a ellas. Alguien salto detrás de Kire tocando el dorso de las manos de Kire, haciendo que se juntasen, para justo después el esbirro sea cambiado de lugar con otro de los miembros de los Cuervos Negros. Alguien le lanzó un tajo con un cuchillo de combate hacia las manos de Kire, pero lo atrapó, sin embargo, le faltaban un par de escamas y una capa de piel además de estar ensangrentadas, pero sus palmas fueron capaces de detener el cuchillo evitando que sus manos sean cortadas.

Pese a haber detenido un ataque, Kire recibió una patada en el pecho por parte de su rival, ocasionando que suelte el cuchillo. El enemigo habló –Campo oscuro ahora– uno de los miembros de los Cuervos Negros hizo un pequeño gesto con su mano desplegando una barrera cilíndrica conteniéndolos dentro, Kire estuvo a punto de salir, pero su rival volvió a hablar y le dijo –Espera chico, te propongo un trato–, Kire se detuvo un momento –Dime– le respondió, su rival volvió a hablar –Primero presentémonos, tranquilo ninguno de mis hombres atacaran a esos mercaderes, tenemos bastante tiempo– Kire se acercó a su rival y dijo con voz firme –Mi nombre es Kire, soy un esbirro que nació sin muchas escamas, mi madre murió poco después de permitirme vivir, mi padre me abandono cuando era pequeño, fui criado por mis abuelos, unos panaderos de mi aldea, la aldea Dinivus. Un día decidí seguir el camino común de los esbirros, el ser mercenarios y eso es todo lo que te diré– Kire saco su cuchillo mientras seguía teniendo la mirada fija en su oponente este vestía varias túnicas de color negro con cuervo grabado en estas, este dio una pequeña carcajada y dijo –Cálmate chico, tu vida y la de ellos están en tus manos, pero todavía no haremos nada, no quiero conversar con alguien que está apuntándome con un cuchillo– Kire bajo y guardo su cuchillo, su rival volvió a hablar y dijo –Gracias, ahora déjame empezar, soy Chersh, el líder y fundador de los Cuervos Negros, era el hijo de unos humildes granjeros, los cuales fueron brutalmente estafados y asesinado por La Orden de los Mercaderes, también intentaron matar al hijo de estos, pero este no fue tan fácil de matar– dijo mientras cerraba los ojos y señalaba las cicatrices en forma de X sobre estos, para después volver a retomar su discurso – A esa organización le pertenecen las personas que estas escoltando, pero no te preocupes no tengo nada personal contra ellos, quizás solo les robe, aunque no sé si tuvieron algo que ver con la muerte de mis padres, pero ahí es donde entra nuestro pequeño trato, yo no tocare a ninguno de estos bastardos si logras derrotarme. Me parece justo, pero la lucha será a muerte, aunque respetare y te dejare vivo si te rindes, pero no a ellos, ¿qué me dices? – Kire mirándolo a los ojos respondió –Te venceré– Chersh sacando su cuchillo dijo –Esto será divertido–.