Cap. 45: Lara

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La mujer era a ojos de Layron joven, solo un poco menor que Jago, su pelo de color castaño claro suelto y bastante largo, esta era más alta que él, lo cual lo molesto ligeramente, pero lo que verdaderamente le molesto fue que lo llamase niño. Esta señalo su arma, era una cuchilla muy fina bastante curveada, lo cual permitía cortes limpios pero siendo bastante inútil en una batalla normal, pero para un asesinato seria perfecta, pero esta estaba rota exactamente a la mitad, Layron intuyo que fue por el impacto con la armadura, este rebusco en su bolsa sacando una aguja muy fina y entregándosela, en condiciones normales no le hubiera entregado armas a desconocidos, pero sabiendo que el arma original tenía suficiente filo para seguir cortando y de momento seguía vivo además de creer que fue ella quien mato a los esbirros de antes y por ultimo sabía que quien estaba encargado de eliminar a estos bandidos era una mujer, así que como todo encajaba en esta persona Layron decidió confiar.

La mujer ya con la aguja en sus manos, manteniéndose agachada y escondida, dio un suspiro cerro los ojos. Y desapareció, dejando una fuerte ráfaga de viento, segundos después todos los esbirros los cuales tenían las armaduras soltaron rápidamente un gran chorro de sangre a través de los pequeños huecos de los cascos, la sangre broto hacia el cielo, titando el césped de una combinación entre rojo y verde.

La mujer había desaparecido, pero el olor a vomito seguía en el aire, esta poco después de un momento salió de un arbusto y se puso de pie diciéndole a Layron –Gracias niño, ¿Cómo te llamas? Y... ¿Qué hacías aquí?–, Layron se puso de pie y dijo –Lo mismo va para ti, pero responderé primero, me llamo Layron, estoy investigando a estos tipos y a su líder–, La mujer se sacudió un poco el polvo de la ropa y le dijo –Me llamo Lara, me pagaron para encargarme de estos tipos, sabes estas de suerte, te pagare la aguja por la información, en la zona sur en el reino de Cravatte o ciudad, ya sabes con el cambio de nombres actual, da igual la verdad, bueno volviendo a lo que estaba, ahí búscame y te mostrare mi investigación–.

Layron respondió algo desanimado –Vivo en Hairo actualmente y me queda demasiado lejos esa zona–, entonces Lara se quedó pensando un momento dando un chasquido dijo –Ya se, publicare una misión en Hairo y te enviare la información por privado, aunque si hago eso, no poder ayudarte en aquella misión, ¿Crees poder?–, Layron sabía que este es el momento que había esperado desde hace mucho tiempo este sabía que una vez que diera su respuesta no habría marcha atrás, era hora de terminar este juego que duro ya casi 9 años –espere mucho tiempo una oportunidad así, sé que puedo con eso, Lo hare–.

Voluntad Renaciente: El Capricho de DiosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora