Diecinueve

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Erick

Cuando termine de hablar con la mamá de Joel, el ya no se encontraba en la habitación, demasiado angustiado salgo detrás de él no sin antes tomar unos abrigos y los zapatos de él, al ver que no llevaba nada puesto.

tomo las llaves del auto y salgo, lo veo correr a lo lejos, me apresuro a encender el motor y arrancar lo mas rápido posible, maneje hasta llegar a su lado gritándole varias veces, hasta que por fin volteo a verme y subió al auto todo empapado, cuando voltee a ver su rostro mi corazón se marchito al ver que sus ojitos estaban completamente rojos por las lagrimas que se camuflajiavan con las gotas de causadas por la lluvia.

-Mi her-hermanita, mi herma-nita Er...-dice en un sollozo, y yo trato de mantenerme fuerte y no derrumbarme de igual manera, ahora es cuando más necesita de mi apoyo y tengo que ser fuerte por él.

-Tranquilo, te prometo que la encontraremos y estará bien...-le digo algo nervioso al ver a lo lejos unas cuantas patrullas justo frente a la casa de ellos.

estaciono el auto, pero antes de bajar le extiendo los zapatos y y su chamarra, porque realmente el aire esta helando allá afuera.

Es el primero el correr y entrar a la casa, yo entre después que él, la mirada que me regala la señora no es para nada amistosa pero ambos sabemos que no es el momento para hablar de las indiferencias.

-¿Qué fue lo que paso mamá, como es que se perdió? -pregunta un poco alterado, toco levemente su hombro para calmarlo un poco.

pone su mano arriba de la mía y la acaricia para mantenerse calmado.

-No lo sé, horas de-después de que te fuiste estuvimos en la sala, pero ella se fue hacia su cuarto y estaba viendo videos tranquila, yo la deje y me fui a preparar la comida, pero cuando ya no la escuche más, fui a verla y ya no estaba, busque en toda la casa y en el patio y nada, hasta que me di cuenta de que la puerta estaba abierta -habla con la voz temblorosa. tiene su rostro un poco hinchado y rojo por el llanto que pudo haber tenido todo este tiempo, quisiera poder ayudarla en darle algún calmante pero mejor trato de mantener mi distancia y no volverlas más tensas.

-¿Cuantos años dice que tiene la niña? -pregunta un oficial con una libreta en mano.

-tres años y nueve meses -contesta rápido Joel dirigiendo su mirada a este.

-Esta bien, ya tenemos los datos suficientes para hacer empezar la búsqueda mañana por la tarde, hasta que pasen las veinticuatro horas desde su desaparición. si aun no aparece en el transcurso de estas horas, publicaremos los datos de la niña para pegar los boletines en toda la ciudad, cualquier cosa nos mantendremos en contacto -es lo único que dice para después tomar camino e irse como si nada.

Me quedo viendo con algo de coraje hacia la puerta.

-No lo puedo creer, se trata de una niña desaparecida y actúan como si nada...-suelto un bufido algo enojado.

-Querido no actúes como si realmente te importara que mi hija este perdida, nada de esto estuviera pasando si tu no hubieras entrado a la vida de ellos, si Joel no se hubiera ido detrás de ti, yo aun tuviera a mi niña en mis brazos -es lo primero que me dice al dirigirme la mirada.

-Mamá por favor, no es el momento. -grita Joel algo frustrado con la situación.

me quedo en silencio por unos segundos pero decido hablar.

-Sí señora, no es el momento para sus insultos sin sentido, ahora lo que más me importa es encontrar a la hermana de mi novio, y si usted no va a cooperar, no nos haga perder el tiempo por favor -termino sin recibir respuesta de alguno de los dos y salgo de la casa, recibiéndome las gotas de la lluvia que aun esta demasiado fuerte.

Camino hacia la cajuela del auto y empiezo a buscar la lampara que Zabdiel suele guardar por cualquier emergencia, hasta que siento como alguien se posiciona a mi lado, no tengo que voltear para saber de quien se trata.

-Yo...

Lo interrumpo poniendo la lampara en sus manos, me mira confundido.

-Buscaremos a Sol, y no regresaremos hasta saber que ya esta sana y salva contigo -le digo soltando un suspiro- yo manejare por toda la ciudad y tu trataras de buscar entre los arboles o en las casas, pero la buscaremos, no tenemos que esperar hasta mañana para esperar que algo malo haya ocurrido en el lapso de la madrugada.

muerde su labio inferior y a pesar de la lluvia mojando su rostro, puedo ver como lagrimas salen de sus ojos. Asiente lentamente.

-gracias mi amor -acaricia mi mejilla lentamente.

le regalo una sonrisa y me alejo para empezar.

-Vámonos, tenemos que encontrar a Sol -asiente rápidamente y se sube al asiento del copiloto y yo a la par encendiendo el auto para empezar a buscar desde el inicio de la cuadra.

por el retrovisor puedo ver a la señora parada en la entrada de la casa viéndonos, la ignoro y arranco.

Te encontraremos Solecito 


:o

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El Tutor De Sol || JoerickDonde viven las historias. Descúbrelo ahora