Ocho

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Erick

–Er, no creo que sea conveniente salir con Joel -escucho como habla Zabdiel afuera del baño.

Salgo y veo que está sentado en mi cama jugando con un peluche.

-¿Porqué lo dices? creo que estoy lo suficientemente grande para salir con quien yo quiera -respondo regresando nuevamente al baño para seguir arreglando mi cabello.

Lo escucho soltar un suspiro.

-Yo sé que ya estás grande, y no lo digo por ti, si no por él, lo conozco lo suficientemente bien para saber que puede querer solo una aventura contigo -frunzo el ceño mirando mi reflejo en el espejo.

Tengo que aceptar la realidad, Joel siempre fue un coqueto con los chicos y chicas, solo era para pasar el rato y luego los dejaba, bueno eso está donde yo me daba cuenta. Creo que nunca ha tenido un relación formal.

Vuelvo a mi cuarto y voy hasta mi escritorio.

-Lo sé Zab, pero Joel me ha gustado desde que se volvieron amigos y supongo que está es una buena oportunidad para poder conocerlo -ordeno algunos papeles- y si veo que tan enserio va, yo sabré hasta dónde llegar en límite.

Me recargo en la esquina del escritorio y cruzo los brazos.

-Esta bien, pero prométeme que me hablarás por cualquier situación -giro los ojos pero asiento.- saludas a Katy de mi parte.

-¿Porqué no vas? -le preguntó poniendo un poco de bálsamo en mis labios.

-No gracias, ahí estará Edna y no la quiero ver ni en pintura -hace un gesto enojado, y lo entiendo, después de lo qué pasó entre ellos es normal que no la quiera ver, hasta yo lo haría- solo cuídate por favor.

Me acercó a él y acaricio su cabeza.

-Sí, señor enojón -suelto una risa al ver su cara.


[•••]


Camino nervioso aún lado de Joel por la banqueta, cada movimiento que hace provoca que su loción desprenda su olor y llegue a mi nariz, me hace querer abrazarlo y esconder mi rostro entre su cuello y aspirar fuertemente hasta embriagarme de él.

Carraspeo un poco al sentir una pequeña incomodidad en mis pantalones.

-Espero no estar aburriéndote -suelta de repente y volteo a verlo confundido.

Suelto una risa nerviosa.

-Por supuesto que no, creo el que realmente te está aburriendo soy yo -siento como un calor sube por mi cuello hasta mi rostro- No soy muy bueno en conversar, o más bien no tengo nada interesante que decir.

-Claro que no, yo creo que eres muy interesante, por ejemplo; me podrías contar porque decidiste estudiar eso sobre los niños -soltamos una risa.

-Bueno, es que los niños me encantan, Amo pasar tiempo con ellos y ayudarlos a desarrollarse -hago un encogimiento de hombros y volteo a verlo, está sonriendo mostrando su perfecta dentadura, creo que me dará algo si sigue alterándome más- siempre he querido tener hijos.

Supongo que eso último estaba de más decirlo, pero creo que no le molesta, porque me sigue el tema.

-Antes no quería tener hijos, pero desde hace un tiempo cambié de decisión -veo cómo pasa la lengua por sus labios- aunque me gustaría tenerlos cuando esté bien económicamente.

Asiento dándole la razón.

-Sí, lo sé, eso sería lo más importante antes de tener cualquier responsabilidad.

Seguimos hablando de varios temas quitando la tensión que había entre nosotros desde que salimos de mi casa, poco a poco nos relajamos y entramos en confianza que me hizo sentir cómodo, como hace tiempo quería estar.

Llegamos a la casa de, Katy, la cual ya se podía escuchar las voces de varias personas y la música a todo volumen, tomo la mano de Joel para jalarlo hacia la puerta.

Poco a poco siento como intenta entrelazar nuestras manos y claramente yo no me opongo. Me gusta.

Después de tocar la puerta nos abre mi amiga.

-Erick bebé, llegaste -me saluda con una sonrisa, me da un abrazo corto.

-Feliz cumpleaños linda -le sonrió y le extiendo el pequeño regalo que traía en la mano- espero y te guste.

-No tenias por que molestarte -la sonrisa que tenia se borro cuando vio a la persona junto a mi.

Jalo a Joel mas cerca para presentarlos,

-Katy él es Joel, Joel, ella es mi mejor amiga Katy -los presentó con una sonrisa.

-Hola Joel -saluda ella seriamente- ya lo conocía.

-Hey Katy -dice Joel con algo de incomodidad de en su voz, yo frunzo el ceño confundido.

Ella voltea a verme y me regala otra sonrisa.

-Pero pasen, disfruten la fiesta, por ahí andan los demás -se hace aún lado para que pasemos.

Veo como se pierde entre las personas, jalo a Joel por toda la casa, mientras voy saludando a todos, hasta que llegamos a la cocina.

-¿Quieres? -le señaló una cerveza, asiente.

Hay pocas personas ahí, así que me atrevo a hablar.

-No creí que se conocieran -tomo un sobo de mi botella.

Se enoje de hombros restándole importancia. O eso creo.

-Fue una de las tutoras de Sol.












Hola preciosxs.

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El Tutor De Sol || JoerickDonde viven las historias. Descúbrelo ahora