capitulo 31

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En su primer día de trabajo Rachel llegó casi 20 minutos antes del horario que habían acordado, por los nervios. Es verdad que sabia de mecánica pero era totalmente una autodidacta y no sabía si eso sería suficiente para trabajar en un taller mecanico

-que bueno saber que eres una persona más que puntual- le dijo Jack cuando fue a abrirle para que pasara

-si, bueno, no me gusta hacerme tarde- en ese momento llegó una mujer de cabello oscuro y ojos cafes

-siento molestar pero Jack, Timmy te espera-

-si, ahora voy- dijo el hombre

-lo siento pero tendras que esperarme. Tengo que acompañar a mi hijo a la escuela-

-no hay problema. Esperaré aquí-

-de ninguna manera- interrumpió la mujer

-ven adentro, te sirvo una taza chocolate caliente-

-no se preocupe señora no quiero molestar-

-creeme Rachel, no discutas con Janet es inútil, no la vas a hacer cambiar de opinión- le susurró a modo de consejo pero la mujer lo estaba escuchando todo

-entonces no me queda otra. Aceptaré- sonrió

-muy bien, pasa- la mujer, Janet, la guió hasta la cocina adonde un niño de cabello negro y ojos azules estaba terminando su desayuno estando ya listo para la escuela

-Timmy apurate o se te va a hacer tarde- le recordó la madre

-si mamá- respondió mientras se levantaba de la mesa para dejar sus platos en el lavadero

-vamos- le dijo el padre

-hasta luego mamá- la saludo con un beso en la mejilla para luego mirar a la chica

-adiós también a usted- saludó un poco confundido pero educado antes de irse con su padre

-su hijo es un poco tímido me parece-

-si, es un poco reservado pero es muy afectuoso- la mujer le sirvió una taza de chocolate caliente para luego sentarse frente a ella

-te llamas Rachel verdad?-

-si-

-yo soy Janet Drake...no quiero desanimarte a trabajar para mi esposo, de hecho realmente necesita una ayuda, pero estás conciente de que el sueldo no será alto?-

-si, señora. No se preocupe. No buscaba un trabajo propiamente por el dinero pero...pasé algunas dificultades y tiempos realmente duros que quebraron todo lo que había contruido. Ahora trato de recontruir todo poco poco. Dejé la universidad pero no logro quedarme todo el dia sin hacer nada y cuando encontré este anunció pensé que era perfecto. Admito que lo unico de mecánica que se es lo que aprendí sola en años de ajustes a mi motocicleta pero espero que sea suficiente- no sabía porqué se lo estaba contando todo a esa mujer que ni siquiera conocia.

En serio no entendía porqué estaba confiando en ella así de rapido. Normalmente no se comportaría así...tal vez, solo, tal vez fue como su hijo la miraba, con profundo afecto para su madre, la forma en que la saludó sabiendo que cuando regresaría de la escuela ella seguiría ahí esperando para recibirlo con los brazos abiertos para abrazarlo y comerselo a besos, tal vez fue el lazo madre-hijo que nunca tuvo con la mujer que se definía su madre pero que hubiera querido tener

-no te conozco Rachel pero me pareces una buena chica que está trabajando duro para tener la vida que merece...no te preocupes veras que todo va a estar bien-

-gracias señora Drake-

-llamame Janet-

-gracias...Janet-

-no hay de que Rachel- siguieron minutos enteros de silencio pero en ningun momento se volvió un silencio incomodo.

Rachel por lo general no se sentía a gusto con las mujeres mayores que ella, siempre se sentía incomoda y juzgada, claramente había alguna que otra excepción como lo eran Iris West, Dinah Lance y Diana Prince. Nunca entendio, o mejor, nunca quiso entender el porqué y ahora se encontraba en esta situación tan comoda e relajante. Las tres anteriormente nombradas se metieron meses y meses para ganarse la completa confianza de la joven Wayne pero Janet...el solo verla con su hijo la hacía relajar como si le dijera a ella con toda la sinceridad del mundo "tranquila. Puedes confiar en mi" tal vez no estaba del todo bien confiar en alguien tan rapidamente pero no podía detener sus emociones

-ya regresé- anunció Jack Drake al entrar en la casa

-vas a mostrarme lo que sabes hacer chica?- le preguntó juguetón

-claro- Rachel se levantó de la mesa

-gracias por la agradable mañana Janet-

-gracias a ti Rachel y buena suerte- el hombre y la chica se retiraron al taller

-me pareces mas serena de cuando llegaste- comentó el hombre

-si, su esposa me regaló una linda mañana- Jack río sutilmente con orgullo

-esto no me es nuevo- dijo

-tal vez puede parecer un poco machista dicho de esta forma pero realmente creo que Janet nació para ser madre. No me malinterpretes, es una mujer muy inteligente y buena pero también es cariñosa, amable y reconfortante. Cuando la conocí trabajaba de maestra en un kinder y los niños la amaban como a una segunda madre. Tiene una extraordinaria empatía y los niños enseguida se encariñan-

-pude experimentarlo en carne propia hace unos minutos, no hace falta que explique- se rió ella con ternura al ver los ojos brillantes de amor hacía su esposa

-me hizo bien sentir esta sensación una vez en la vida-

-tus padres...- Jack no supo si continuar o no pero la chica se le adelantó

-mi madre nos dejó cuando yo era pequeña. Mi padre es fantastico y me ama con todo su ser y yo a él pero se le dificulta expresar su afecto. Es solo que siempre soñe con una madre que viniera con mi padre a darme el beso de las buenas noches, que jugara conmigo, me peinara y conversara conmigo sobre chicos, es decir, todas esas cosas tontas que las madres hacen y que te hacen sentir la calidez de tenerlas-

-lamento lo de tu madre-

-no lo haga. Es cierto que hubiera querido una madre presente y cariñosa como su esposa lo es con su hijo pero mi vida actual me gusta mucho y si es así, a fin de cuentas, tambien tengo que agradecerle a sus pesimas decisiones-

-enserio admiro a las personas que saben ver lo bueno en cada situacion-

-se trata de mucho ejercicio. Tampoco solía encontrarlo pero luego de años entendí que hay algunas cosas feas que nos sirven para las cosas lindas de nuestras vidas-

Robin-una historia que continuaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora