capítulo 17

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En ese momento una sombra oscura llegó y le arrebató la pistola de una patada. Rachel retrocedió con un salto y todo se quedó estático por un momento. Miró a los tres hombres frente a ella. Detras estaban Red Hood y Red Arrow con este último que se había acercado al menor para asegurarse que la herida en su mano no fuera demasiado grave y frente a ellos estaba el imponente Batman. Parecía que nadie se iba a mover pero al estar concentrada en el murciélago no se dió cuenta de que Red Arrow había preparado un flecha y cuando lo vió él ya la había tirado cerca ella. Todo su alrededor se llenó de humo. Rachel intentó reparar su boca y nariz con su antebrazos manteniendo la guardia alta pero era dificil. El gas lagrimogeno le hacía la vista borrosa y no sabía desde donde Batman saldría a atacarla. Cuando el hombre apareció entre el espeso humo gris, Rachel apenas pudo defenderse. Esquivó el golpe y saltó apoyandose a los hombros de su padre haciendo que se balanceara hacía delante pero en ningun momento perdió el equilibrio. El mayor se volteó con una velocidad inhumana lanzando unos batarangs hacía la chica pero que nunca llegaron a ella ya que tres disparos destruyeron los batarangs. Cuando voltearon vieron a Deathstroke con su arma humeante levantada. Rachel aprovechó el momento de distracción para ir hacía Slade

-DEATHSTROKE!!! ALEJATE DE MI HERMANA!!!- gritó furioso Jason apuntando su arma hacia el hombre.

Rachel vió la intención del peliblanco de agarrar su arma pero no lo permitió y en un rapido movimiento la agarró ella desde la funda atada a la pierna de Deathstroke. Se posicionó frente a él y apuntó la pistola contra su hermano pues sabía que si Slade hubiera tomado la pistola hubiera disparado y si ella estaba delante del hombre su hermano no hubiera disparado asi sus amigos estarían a salvo

-RACHEL QUÍTATE DE ENMEDIO!- gritó Jason

-no- respondió firme

-no le vas a disparar. No te lo permitiré- siguió el silencio absoluto hasta que repentinamente el ruido de un disparo hizo eco en el lugar.

Red Hood sintió el aire caliente y el ardor del plomo ardiente pasar a lado de su rostro pero no era él a quien era dirigido el proyectil sino que al hombre tras él.
Se volteó cuando escuchó un grito y encontró a un hombre mayor gritando de dolor en el piso pues el proyectil fue directo a su pistola haciendo que se hiriera la mano de gravedad

-piensen a él. Nosotros nos vamos- dijo con frialdad antes de irse con Slade de regreso a la guarida.

Apenas estuvieron adentro, Rachel atacó a Slade quien gracias a su entrenamiento militar y características de metahumano logró evitar y responder cada uno de los ataques

-viejo bastardo! No te fue suficiente con obligarme a traicionar a mis amigos, tambien a mi familia- siguió atacando inútilmente.

Siguieron así varios minutos hasta que Deathstroke sacó su pistola apuntandole

-ya me harté de jugar contigo mocosa! Harás lo que yo te digo porqué si no tus amigos mueren y atrévete otra vez a hacerme esta broma y te juro que los mataré con mis manos, a ellos, tu familia y al mocoso de tu novio frente a tus ojos-

-no permitiré que pongas tus manos cochinas sobre nadie de ellos a costa de mi vida!-

-pero que te hace pensar que eres realmente capaz de salvarlos a todos? No podrías hacerlo. Sus vidas estan en mis manos. Esta es la realidad a la que estas vinculada ahora mismo-

-no necesariamente. Ellos, todos ellos saben protegerse, aún no sabiendo que el enemigo está a lado suyo-

-si realmente piensas eso entonces porqué sigues aquí? Yo no te obligo a quedarte aquí. Puedes irte en cualquier momento pero no lo haces así que caben dos posibilidades: o no piensas realmente lo que dijiste o simplemente quieres quedarte-

-créeme, quisiera poderme irme así como si nada pero tambien aprendí a no subestimarte luego de que atacaste a la liga de los asesinos esa vez- admitió en voz baja y resentida como para no hacerce escuchar.

El hombre sonrió satisfecho sabiendo que había logrado domar la fiera que era esa chica a la apariencia dulce e indefensa

-lo que tienes de bueno es que aprendes del pasado-

-me da gusto que lo notaras porqué si tu actual plan, cualquier ese sea, no funciona no caeré dos veces en la misma trampa-

-no me esperaba nada diferente de tu parte pero ahora tienes algo más que hacer- la chica lo miró indiferente

-anda a esta dirección e investiga- ordenó entregandole un papel con una dirección y un número de departamento

-"investiga"? Que se supone que tenga que buscar? Que tipo de información?-

-tu eres la detective. Ahora vete- la chica simplemente obedeció y se fue.

No pensaba poder soportar esta situación por mucho tiempo pero no tenía alternativas y eso empeoraba las cosas porqué más tiempo pasaba con Deathstroke más rabia acumularia y la desquitaria en los trabajos que el hombre le asignaba. Temía poder llegar a hacer alguna tontería o algo iremediable pero lo que más temía era que con el pasar del tiempo dejara de lado sus principios y no quería eso.

Para su suerte el departamento no se encontraba en Gotham City, estaba en un edificio cerca del centro de la ciudad de Blüdhaven. Rachel había escuchado acerca de esta ciudad: tenía la fama de ser la ciudad gemela de Gotham pero no sabia cuan cierto pudiera ser y tampoco tenía el tiempo de averiguarlo pues tenía un trabajo que hacer.
Desde el techo bajó a una de las ventanas de un pasillo, entró por ahí y se dió cuenta que había mucho silencio, no parecía que hubiera alguien en todo el edificio pero eso solo le hacía las cosas más faciles. Controló el numero en la puerta más cerca

-40b- leyó para si misma.

Tuvo que bajar otros dos pisos para llegar al departamento 35b. Una vez que estuvo frente a esa puerta puso atención a su alrededor para asegurarse de que nadie viniera y forzó la cerradura para poder entrar en el departamento.

Robin-una historia que continuaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora