Un Nuevo Comienzo

Capítulo 10: decoraciones

Severus dejo sobre la mesa una pequeña lamparita verde con forma de serpiente y miro a su alrededor, no sabía por dónde empezar y eso lo frustraba bastante, se paseo por la habitación dando vueltas y pensado por donde empezar, la cuna? Las estanterías? La habitación en sí? Luego de quince minutos de pasearse por la habitación de su bebé agarro su varita y con un movimiento todos los muebles desaparecieron dejando la habitación casi vacía, de la nada aparecieron los nuevos muebles que había comprado y se quedaron en una esquina esperando ser colocados, Snape tomó una cómoda color azul claro y la deposito al lado de la cuna del niño, así fue colocando cada cosa en su lugar hasta que al final parado en el medio del cuarto observo su trabajo, en la pared opuesta  a la puerta estaba el ventanal y a su lado estaba la cuna color  negra con un dosel color plateado, las cortinas de la ventana eran blancas, al otro lado de la ventana ( izquierda) estaba el ropero enorme y al lado una pequeña carpita donde su hijo podía jugar dentro, también estaba la alfombra que cubría gran parte de la habitación   que era su pequeño rincón de juegos en su propio cuarto en el caso que no quisiera ir al otra habitación. También se dio cuenta que había comprado un cambiador cosa que la cuna ya traía incluida así que lo hizo desaparecer, así como la enorme chimenea ya que no quería que su hijo se terminará quemando en algún momento, las letras de "Harry Snape" levitaron y se colocaron en la pared encima de la cuna del bebé, Snape se quedó mirando la pared y con un movimiento de su varita hizo aparecer unos cuantos animales que recorrían las paredes de la habitación mientras se perseguían unos a otros, coloco también un par de peluches en donde estaba la pequeña carpa y acomodó la lámpara de serpiente sobre la cómoda al lado de la cuna de su hijo, ahí encima también coloco unas fotos ( recientes) otra lámpara normal y un libro de cuentos infantil que planeaba leerle hoy a su hijo.

Escucho la red Floo encenderse y las risas de su hijo inundaron el lugar, se dio vuelta y salió hacia las escaleras donde se podía ver la sala de estar en donde estaba su madre Minerva Mcgonagall y su hijo junto a Albus

—como pasaron? — preguntó Snape llegando hasta ellos

—muy bien— respondió Minerva sonriendo- se ha portado de maravilla

—me alegro— dijo el pocionista levantando en brazos a su hijo

— la próxima salida deberías acompañarnos sevy— dijo Albus

—no me llames así!! — respondió furioso

—yo creo que es un lindo apodo — concordó Minerva feliz

Severus le lanzo una mirada furiosa a sus padres y estos se rieron, se despidieron de ellos y se fueron cada uno a sus casas, no sin antes Dumbledore proponerle a su hijo que se pasara por su antigua casa. Severus observó a su hijo que lo miraba atento, sonrió y le dijo

— recuerdas todo lo que compramos en el Callejón Diagon? — preguntó, su hijo asintió— bien, tengo algo que mostrarte

Snape llevó a su hijo a su habitación y dejó que el bebé la mirara, había cambiado desde la última vez que la uso y se aseguró de aprovechar el espacio mejor que antes. Harry por otro lado estaba feliz, había varios peluches ( le gustaban mucho) y estaba mejor que la habitación anterior que no es que no le gustara solo que esta le gustaba más aún. Severus lo dejó en el suelo y el niño se puso a recorrer el lugar, llegó hasta la entrada de la pequeña carpa y metió su cabeza en el interior sorprendiendose, era enorme y claramente mágica, entro feliz mente y noto que estaba fresquita y tenía varios juguetes más adentro, se giro sonriendole a su padre que le devolvió la sonrisa desde fuera, mientras Snape lo observaba Harry tomó un peluche de gato tabby que era igual a la forma animaga de su abuela y comenzó a jugar con el, luego de diez minutos el niño salió de allí y se quedó sentado en la alfombra observando el lugar