Capítulo 18: Problemas

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Los meses habían pasado volando y diciembre había llegado con un frío gélido, los alumnos andaban con dificultad gracias a los tantos abrigos que debían ponerse encima, aunque algunos usaban hechizos calentadores en vez de abrigarse tanto. Severus estaba atareado con las pilas de pergaminos que debía corregir para entregar a sus estudiantes y como consecuencia no podía prestarle tanta atención a su hijo que ya tenía once meses, casi el año y eso a Harry lo molestaba mucho , ahora que podía caminar casi  perfectamente le gustaba recorrer toda las habitaciones donde se encontraba para ver que podía usar para jugar ( ya había encontrado varios objetos peligrosos que Severus tenía "escondidos"). Por otro lado Snape estaba bastante cansado de perseguir a su pequeño hijo para que no se lastimara o dejara de encontrar objetos que ni el sabía que tenía aún.

—Harry no!!!—gruñó Snape llegando hasta su hijo y quitándole una poción altamente peligrosa que de alguna forma había encontrado

Snape dejo a su bebé en un rincón como hacia básicamente casi cada día, Harry protesto pero su padre volvió a dejarlo en su lugar. Harry odiaba estar sentado allí castigado en vez de estar recorriendo el lugar, aunque ya no le quedaba lugar que recorrer pero siempre lograba encontrar algo que fuera interesante. Tampoco le gustaba que su padre se hubiera vuelto más malhumorado de lo normal desde hace ya un mes, no entendía el porque ahora era así, que había pasado? Antes jugaba más con él y pasaban tiempo juntos, aún daba clases pero siempre tenía un tiempo para dedicarle a el, sin embargo ahora  que podía hacer las cosas y no depender tanto de los demas nadie quería estar con el, ni siquiera sus abuelos que no veía desde hace días. El sabía que se acercaban las vacaciones de invierno y tenía la esperanza de que tal vez en ese momento tuvieran más tiempo ya que había menos estudiantes en el colegio pero dudaba bastante. Harry levantó la vista y observó que Severus estaba corrigiendo ensayos muy concentrado  mientras de vez en cuando negaba con la cabeza y susurraba algunas palabras que no llegaba a escuchar del todo. Severus se levantó del asiento y agarró a su hijo en brazos llevándolo hacia su habitación

— terminare de corregir ensayos en unos minutos y luego iremos a comer al Gran Comedor. Quédate aquí y juega a algo pero no molestes, necesito concentrarme,  Entendido?— dijo Snape fríamente

Harry lo miro por unos momentos y asintió con la cabeza

Severus salió de la habitación y cerró la puerta para desgracia de Harry. El bebé observo la habitación donde habían pilas de juguetes pero nada le llamó la atención, quería jugar con su padre no estar encerrado en una habitación como hacían los Dursley. Se levantó con algo de dificultad y miro alrededor, nada que hacer, y empezaba a no gustarle estar solo ahí, que pasaba si llegaba alguien y le hacía daño? Harry miro con temor hacia la cama con dosel que había en su cuarto, concretamente abajo de la cama donde no se podía ver absolutamente nada, entorno los ojos notando como algo se movía en las sombras, tragó saliva y se alejó hacia el otro extremo de su habitación. El corazón de Harry comenzó a acelerarse, donde estaba su padre? Porque lo había dejado solo en la noche en una habitación tan horrible ? Su mente adulta le decía una y otra vez que allí abajo de la cama no había nada ni nadie pero su mente infantil seguía teniendo miedo de lo que sea que hubiera bajo de la cama. Harry se sobresalto cuando la puerta de la habitación se abrió entrando su padre, Harry corrió hacia el cayéndose a los pies de Severus

—que pasa Harry?— dijo con voz cansada Snape

Harry señaló hacia abajo de la cama

—se te cayó algo ahí?— pregunto nuevamente

Harry negó con la cabeza y se aferró a su padre enterrando su rostro en la túnica negra. Snape llevo a su hijo al cambiador y le cambio los pañales, luego fue al ropero y eligió dos buzos y dos camperas y se las presento a su hijo

Un Nuevo ComienzoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora