Un Nuevo Comienzo

Capítulo 21: Feliz Cumpleaños!!

Enero ya había llegado, Harry estaba feliz  por su cumpleaños, y definitivamente su padre no compartía su estusiasmo ya que sabía que Albus le esperaba con una maldita fiesta, aunque claramente esto Harry no lo sabía, el no debía saber nada, tenía que ser sorpresa. Actualmente era domingo nueve y Harry estaba corriendo por la sala de estar persiguiendo a Akima que corría feliz tratando de no ser atrapado por su dueño. Severus estaba sentado en el sillón con un café y libro en la mano mientras que su hijo y su mascota corrían a su alrededor , esto le impedía concentrase y estaba perdiendo la paciencia

- Harry!!! Ve a jugar a tu cuarto!!! - regaño Snape furioso

- no!!! - dijo Harry feliz , ya que sabía que su padre odiaba esa palabra

El bebé paso "corriendo" y le quito el libro de la mano con la intención de que su padre también le persiguiera cosa que logró, en dos pasos Snape agarró a su hijo y le quito su libro, lo dejo devuelta en el suelo y el bebé lo miro mal, Harry intento subirse en el regazo de su padre pero este lo volvió a dejar en el suelo

- vete a jugar Harry!! - ordenó Snape enojado

- no!!! - dijo Harry

- es lo único que sabes decir?- pregunto Snape con la esperanza de que usara un "si" en vez de un no, pero no obtuvo lo que quería

- no - dijo el bebé tercamente

Harry miro a su padre por unos segundos, otra vez lo volvía a ignorar , quería jugar con el!! Se dio la vuelta y vio a través del gran ventanal como Hedwig y Layla volaban por el blanco piso del jardín , seguramente cazando algún ratón que estaba escondido debajo de toda la nieve. Vio como ambas lechuzas se llevaban bastante bien prácticamente desde que se conocieron, era raro ya que pensó que Layla se pondría celosa de su nueva compañera pero no fue así al parecer. Mientras observaba a los animales que jugaban en la nieve Harry se sentó en el suelo, y si iba afuera también? Total, su padre no le estaba prestando atención y seguramente sí salia podía jugar con los animales que allí habían y parecían que se estaban divirtiendo juntos. Se levantó de suelo y miro a su papá que aún estaba concentrado leyendo su libro de pociones. Sin hacer el menor ruido subió las pequeñas escaleras que había hasta la puerta principal y la abrió, una corriente de aire helado le hizo congelarse hasta el último hueso, pero aún así salió de la mansión hacia el patio delantero, todo el piso estaba cubierto de gruesa nieve que casi no lo dejaba caminar bien, de hecho era casi imposible para el desplazarse. Haciendo un esfuerzo más rodeo la mansión y luego de diez minutos logró llegar al patio trasero, notando que allí había una puerta negra que daba a la casa, se rió de lo tonto que había sido ya que pudo haber usado esa puerta, si supiera donde se encontraba. Bajo las escaleras hasta el patio y prácticamente se hundió completamente en la nieve, intento salir pero no pudo, hasta que Akima llegó en su rescate, comenzó a cavar un pozo y así Harry pudo salir. Harry estornudo una y otra y otra vez, se sacudió los mocos con la manga de su campera fina y siguio caminado detrás de Layla que inexplicablemente parecía saber que era lo que quería su dueño. Llego hasta donde estaban los animales que lo observaban con interés, un ulular molesto llegó desde un árbol cercano, Harry se giró para ver a Hedwig y Layla mirarlo con atención y reproche , les saco la lengua y comenzó a jugar con uno de los gatos que allí había, también un pavo real se acercó a el bebé con interés .

Harry jugo por los próximos cinco minutos hasta que noto que le costaba respirar por su nariz ya que comenzaba a estar tapada, también que tenía frío ya que la ropa que tenía era bastante fina y la garganta le dolía bastante. Vaya defensas de mierda tenía!!! Pensó Harry molesto, pero no tuvo mucho tiempo para pensar mucho más ya que una voz furiosa dijo a sus espaldas

- que crees que estás haciendo Harry Severus Snape ? - susurro Snape furioso, tan bajo que casi no lo escucha

Harry se quedó totalmente quieto, no había gritado y eso era muy malo, los ojos negros de su padre brillaban peligrosamente y su capa negra ondeaba tras el dándole una apariencia aún más terrorífica, eso sin contar le hecho de que Harry era muy bajito al tener físicamente  un año . El bebé estornudo por enésima vez en la hora que había estado allí. Snape gruñó y agarro a su descarriado hijo dirigiéndose hacia dentro de la casa, subió las escaleras y se dirigió al baño donde abrió la canilla del agua caliente y lo dejo fluir, una vez que la bañera estuvo llena comenzó a desvestir a su hijo sin dirigirle la palabra