a place to hide ✦ lawrusso

2. Ocupado

Mojaba sus manos, y cómo no. Su cabello había sido arruinado con un huevo. Su figura frente al espejo lo hizo en parte reírse de sí, hacía mucho que algo "de adolescentes" no le pasaba.

Por el espejo logro ver a un chico. Este vestía cómo esqueleto, apenas y podía reconocerlo. ¿Iba en esa escuela?

— ¿Johnny?

Sí. Iba en esa escuela. Espera, ¿qué? ¿por qué buscaba a Johnny? ¿quién era él?
Giró su cuerpo, siguiendo con su mirada cada paso y acción que el masculino daba. Se fijaba bajo los cubículos, incluso daba pequeñas tocadas a las puertas, hasta que a una la golpeó con su puño repetidas veces.

Un chico rubio se asomo por arriba, este llevaba audífonos y el mismo traje que el otro sujeto. Parecía que iban combinados.

— ¿Ya terminaste de armarlo?

¿Armar qué?

— En un minuto. — contesto el rubio un tanto fastidiado.

¿ARMAR QUÉ?

—Iré a buscar a los demás.
— Bien.
— Date prisa.

Escucho pasos. Pasos que indicaban que por lo menos dos personas habían salido de ahí. Sabía que uno de ellos no era Johnny, por lo que, al ver una manguera conectada al grifo de una llave, decidió tomarla.

Se metió al cubículo de al lado, sintiendo sus manos temblar e incluso su corazón latir con más fuerza de lo normal. Se asomo, y se asomo con todo el cuidado posible. No hizo ruido, pero sin embargo, quería hacerlo al ver que aquel rubio armaba un porro. Apretó con fuerza la pared del cubículo, rodando los ojos con fastidio. Quería golpearlo, ¿por qué se metía esas cosas? ¿acaso quería llamar su aten--. La atención de Ali? ¿Ali sabía de eso? mierda, debía decírselo a Ali. Quizá ella pueda hacer algo, decirle a sus padres. ¡Decirle a sus padres, sí! lo regañarían y castigarían por añ---.

— ¿Qué haces?

Terror. Fue lo único que pudo sentir en aquel momento. El de ojos claros lo miraba desde abajo, notando la manguera que descansaba sobre su mano. Este frunció el ceño, levantándose de golpe y dandole un tiempo ilimitado a Daniel de correr, pues cuándo este lo intento; Johnny ya lo tenía acorralado.

— ¿Qué intentabas, LaRusso ... ? —bajo su mirar hasta la manguera.— ¿intentabas mojarme?

—N- No ... yo, yo no--.

— ¿Qué es esta mierda? — sus manos se deslizaron por la cortina de la ducha. Temiendo en cualquier momento que el chico frente a él la rompiese. Sin embargo, lo único que hizo fue reír. —Ya veo, ¿eres tan marica cómo para tener que esconderte?

Sus ojos se abrieron en grande. "Marica", aquella palabra resonó en su cabeza en un gran eco. Miró a Johnny, sus manos estaban estampadas contra la pared, impidiéndole el escapar, su cabello estaba entre despeinado y peinado. No sabía cómo decirlo, cómo ... explicarlo. Pero Lawrence, Lawrence se veía precioso.

— Repítelo. ¡Anda, di que soy un marica!

Johnny ladeo la cabeza confundido, inclusive se había alejado un poco. Estaba atónito, ¿acaso LaRusso le estaba pidiendo ser insultado? se burló. Soltando una risa para entonces encararlo nuevamente.

— Marica.— susurró.

Se sentía orgulloso de haber podido darse cuenta de la presencia de LaRusso, la noche comenzaba a ser aburrida sin él. Iba a decir otra cosa, insultarlo aún más, pero los labios de Daniel ya se habían estampado contra los suyos.