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Había pasado casi toda la tarde ajetreado con algunos labores, hasta que por fin, termino con sus deberes. Se despidió de cada uno de los soldados. Salió de aquella carpa y camino hasta llegar a su caballo, comenzó a desatar la cuerda con la intención de retirarse, más un grito a sus espaldas le detuvo.

—¡Capitán!

Giro sobre sus talones, regalandole una sonrisa al joven mensajero parado a unos cuantos metros de él.

—¿Sí?

—Le han enviado esto. —sacó un pergamino y se lo entregó.— parece que es urgente y debe reunirse en un punto específico.

—Entiendo, ¡Muchas gracias!

Leyó con atención el papel y lo guardo en su bolsillo, subió al lomo del animal, para terminar con esa última labor y poder ver a su amada.

❀❀❀

Kyojuro llegó al lugar citado bajo de su caballo y camino por los alrededores, el anochecer comenzaba a hacerse presente por lo cual no podía enfocar bien las cosas en su entorno. Luego de un rato divisó la silueta de un hombre, camino hacia él con la intención de saludar, pero detuvo sus pasos, sintiendo los latidos de su corazón acelerarse, el hombre se percató de su presencia y giro su cuerpo, era Douma.

Arrugó el entrecejo y se acercó un poco más hacia el, manteniendo cierta distancia.

—¿Puedo ayúdarle en algo? —preguntó con desconfianza.

—Oh, claro que sí.

El de ojos arcoiris sonrió cínicamente y chasqueo los dedos, un fuerte dolor se hizo presente en sus costillas izquierdas, giro el rostro bruscamente para divisar que lo había golpeado, eran dos soldados de Douma. Cada uno con armas y cuerdas.

Aunque intento resistirse y luchar, el golpe en sus costillas lo había dejo mal, le golpearon e incluso patearon inumerables veces. Amarraron su cuerpo con la soga y jalaron de su cabello para que obsevara al hombre, sonrió satisfecho al verle indefenso.

—Se de la pequeña aventura entre mi esposa y usted, capitán. —soltó la bomba con tanta insensibilidad que le provocó náuseas— Y la verdad, no me gusta que intenten burlarme.

Sin previo aviso, los soldados se aprovecharon de su estado y comenzaron a golpearlo fuertemente sin descansó.

Una vez más, le obligaron a subir el rostro para que observará al causante de todo esto, su sonrisa de satisfacción era tan descarada que no se molestaba en siquiera disimularla.

—No eres rival para mí, soy mucho más poderoso que tú, Rengoku.

Kyojuro tenía el rostro lleno de sangre y hematomas pero aún estando en una situación, soltó una risa amarga y torció los labios, podría estar indefenso, más no permitiría que le humillaran.

—Yo siempre tendré algo que tú jamás tendrás en tu miserable vida.—el contrario alzó una ceja ante su comentario— y eso es el amor de la princesa, T/N.

Le había herido el orgullo de la peor manera posible. Totalmente indignado Douma le propino una patada en el abdomen, su saliva se escapó de su boca por lo fuerte que había sido. Chasqueó la lengua molesto y dió la señal para que se lo llevarán.

Observo seriamente como arrastraban al ojos rojizos hasta adentrarlo en una carroza, que lo llevaría directo al palacio imperial.

—Esa pequeña perra me las pagará —masculló para si mismo, el odio que sentía por la joven aumentaba rápidamente.

❀❀❀

Li soltó un bostezo mientras observaba el cielo desde la ventana, hacia bastante rato que la noche había llegado pero Rengoku seguía sin aparecer. Giró su rostro y Observo con preocupación a T/N.

𝗘𝗹 𝘀𝗲𝗰𝗿𝗲𝘁𝗼 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗽𝗿𝗶𝗻𝗰𝗲𝘀𝗮 ┊ 𝖱𝖾𝗇𝗀𝗈𝗄𝗎 𝖪𝗒𝗈𝗃𝗎𝗋𝗈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora