Tony & Peter | Starker | Antología.

18.- Nuestro amor.

Día 18/Abrazo

Peter Parker

Me siento sobre la cornisa, desconociendo a cuantos pisos de altura, siento el aire hacer volar mi cabello y el silencio de la ciudad sintiéndose lejano.

La tranquilidad siendo tan apacible, el sosiego de mis sentidos y pensamientos. Mi segundo lugar seguro después de él, de sus brazos rodeando mi cuerpo.

Es imposible bloquear el recuerdo de mí rodeando su cuerpo creyendo que me abrazaría cuando él solo me abría la puerta. Sin embargo, fue cuestión de tiempo para que me dejase entrar a su vida, sé que no fui el más cuidadoso o el más estratégico, porque vi la confusión en sus ojos reflejándose cada que nos hacíamos más cercanos, yo disfrutaba al ver como bajaba sus muros cada día más.

El cómo sonría de forma más honesta ante mí, sus momentos de decaída siendo visibles y no ocultados. El recuerdo de nuestro primer abrazo siendo cuando él probablemente se encontraba lidiando con sus propias sombras, mientras que yo luchaba contra mis cambios.

El crecer fue un golpe emocional, algunos días me encontraba feliz, otros días se nublaba el camino y no sabía a donde caminar, ni tampoco a donde pertenecía, sentí el ahogo impidiéndome respirar, a mi cayendo sin saber que tan fuerte sería el golpe al tocar suelo. Recuerdo las noches vacías, llorando sin saber el motivo de la agonía sobre mi pecho, rebuscaba en mi interior algo, tratando de estabilizarme, pero no hallaba la calidez.

Fue hasta el día de nuestro primer abrazo, el refugiando sus sombras y yo enfrentando mis emociones. Fue un catalizador para mí, y sé que yo fui su soporte, ambos nos levantamos sosteniéndonos, rodeándonos, compartiendo cada latido que fue sincronizado a la par de ese primer abrazo.

Ahora no hay día ni momento en que no corra hasta él para sentirme protegido, se convirtió en mi hogar, en mi calidez, la cual nada ni nadie podría arrebatarme. Pese a que vimos oscuridad en el transcurso, hoy seguimos aquí, fuertes y juntos.

Es mi héroe. No necesitó rodear al planeta en un gran escudo, cuando solo entre sus brazos me siento invencible.

—Peter —escucho su voz desde adentro.

La simple pronunciación de mi nombre en sus labios me hace sentir lleno, cuando el miedo me invade, sus susurros a mitad de la noche acarician mi alma.

Me sonríe cuando me ve sentado y yo le devuelvo la sonrisa. Lo veo acercarse y cientos de imágenes vienen a mí, la forma de su andar siendo tan característica de él, tan elegante y confiada, sus hombros firmes, su mirada enfocándose en la mía, siendo el portal que me transporta a donde el amor que existe entre ambos sigue creciendo.

—Te he buscado, creí que estarías con May —dice.

—Regrese antes, y al no verte, vine aquí. —Me muevo para mirarlo de frente y dándole mi espalda al vacío—. ¿Qué tal la junta?

—Lo normal. —Me mira y veo la preocupación en sus ojos—. No me gusta que te sientes ahí, puedes caerte.

Yo me rio en señal de ternura.

—No pasa nada, Tony.

Abro los brazos, él lo ve y siquiera lo piensa un segundo, él lo sabe, se acerca hasta a mí y me envuelve en sus brazos.

Escondo mi rostro en su pecho y lo presiono más contra mi cuerpo.

—Nada me pasara, ahora estoy seguro, ¿Lo sientes?

Y sé que lo hace.

Siente nuestro amor.