Gamma ❇ Volkacio / Hollins [Omegaverse]

09

Lunes, 20 de septiembre

A pesar de que ya estaba despierto, a Horacio le costó un poco abrir los ojos. Sabía que era de día por los rayos de luz que lograban pasar a través de las cortinas, pero su cuerpo se sentía tan pesado que le pedía que estuviera en la cama un ratito más. Sin embargo, borrosos recuerdos aparecieron como flashes en su mente, obligándolo a despertar del todo.

Poco a poco abrió sus ojillos, dejando ver sus orbes de colores disparejos. Parpadeó varias veces para acostumbrar su vista y echó un rápido vistazo a su alrededor. Frotó su rostro con lentitud, preguntándose qué día era. Recordó cortas escenas: huir de alfas en la calle, estar en un coche, bajar las escaleras y sentirse mareado pero... ¿Qué más? ¿Qué había pasado exactamente? Al fin se quitó la manta y el edredón de encima para sentarse en el borde de la cama. Había una botella de agua en la mesilla de noche y su garganta picó, recordándole que tenía sed. Bebió un par de sorbos y caminó hacia el baño, en donde mojó su cara con el agua del lavamanos.

Alzó su húmedo rostro hasta el espejo, viendo como las gotas de agua recorrían su extensión. Estaba un poco hinchado y pálido, pero nada más. «¿Cuánto tiempo he estado durmiendo?», se preguntó otra vez. Peinó hacia atrás los cabellos que caían sobre su frente y no tardó mucho más en bajar a la primera planta, en donde el olor a café recién hecho lo guió hasta la cocina.

— Buenos días, bello durmiente.

Chris miró al gamma hacer morritos mientras miraba el lugar, desorientado, lo que le ocasionó una sonrisa. Suspiró de alivio sobre su taza antes de darle un sorbo al líquido que llenaba su interior, Horacio se sentó en frente y apoyó su cabeza sobre la madera de la mesa.

—Tengo hambre — murmuró, observando de reojo al rubio —. ¿Cuánto tiempo he estado durmiendo?

— Cuatro días.

—¿Cuatro días? — preguntó, sobresaltado. Bufó al aire, apoyando las mejillas sobre sus nudillos —. ¿Qué ha pasado?

— Eso quería preguntarte yo — carraspeó su garganta, dejando a un lado su café —. ¿Qué ha pasado?

— No lo sé... Intento pensar pero no me viene nada con sentido a la cabeza.

— ¿No recuerdas nada?

— Recuerdo cosas... Pero no las entiendo. Estaba en la calle, corriendo... Después estaba en un coche y por último recuerdo bajar las escaleras.

Chris volvió a suspirar y bajo la atenta mirada del gamma, abandonó su asiento para dirigirse a la nevera. Buscó algo rápido y suave que sirviera como desayuno para su inquilino pero estar a finales de mes significaba que el refrigerador estaba casi vacío. Agarró un plato que contenía jamón y le hizo un sándwich acompañado de zumo de melocotón, pues no sabía si a Horacio le gustaba el café.

— Perdona que no te de algo mejor pero tengo que ir a hacer la compra — habló, sentándose de nuevo para terminar su café —. Horacio, escúchame atentamente e intenta hacer memoria, ¿de acuerdo? — El nombrado asintió, devorando su desayuno —. Hace cosa de cinco días huiste de mi casa.