Capitulo 3.- Salvando a la exterminadora

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Alastor

Paseaba por algunas calles cercanas al centro donde todos nos separamos, Charlie me suplico que si veía a alguien en problemas lo ayudara.
Eso resultaría algo bastante complicado para mi ya que ayudar no es lo mío, prefiero ver sufrir a todos esos sucios pecadores.

-"¡AYUDA POR FAVOR!"-Escuche gritar a alguien desde lo lejos, parecía venir de un callejón cercano, la curiosidad me mato y fue a ver que espectáculo podría apreciar.

-"¡AHHH AYUDA!"-Llegue y pude ver el origen de aquel pedido de ayuda, era una demonio oveja bastante débil entre todos los demonios, estaba rodeada por dos exterminadores uno de ellos mataba a otro sucio pecador.

Decidí ayudarla, para mi propio entretenimiento claro...

Narrador omnisciente

El demonio se acercó a ellos-"¿Qué pasa aquí caballeros?"-Pregunto Alastor con una gran sonrisa, los ángeles dirigieron toda su atención hacia el-"Créanme que adoro matar más que ustedes...pero odio cuando las personas no tienen el más mínimo respeto por los...débiles~"-Esta ultima frase se escucho distorsionada, la sonrisa de Alastor había incrementado.

-"Estúpido pecador de mierda, ¡no eres superior a nosotros!"-Dijo confiado uno de los exterminadores.

-"Querido, el que juega con fuego...se quema y ​​adivina ¿Qué?...están el infierno"-Dijo Alastor sacando una pequeña flama de fuego de su mano.

De el salían unos tentáculos negros que se dirigían velozmente hacia los exterminadores, estos con una cara tan malvada que parecían mismos demonios comenzaron a volar esquivando los tentáculos y dirigiéndose velozmente hacia Alastor.

Este con un chasquido de sus dedos hizo aparecer un portal bajo sus pies en el cual desapareció en cuestión de segundos, los exterminadores con la velocidad que iban provoco que chocaran entre ellos, aturdidos por el golpe se levantaron sosteniendo sus armas mirando en todas direcciones buscando alguna señal de Alastor.

Escondido entre las sombras se movió hasta ellos posicionándose entre los dos, allí hizo salir sus tentáculos, estos atravesaron a los dos exterminadores.

Los dos cayeron al frío suelo agonizando de dolor, uno de ellos pareció soportarlo menos y perdió la conciencia.

Alastor se acerco a la pequeña demonio-"Estás a salvo querida, corre ve a casa"-Dijo extrañamente amable, en realidad quería que se fuera antes de que cambiara de opinión y la matara junto con los exterminadores, al fin y al cabo el cordero tiene también un buen sabor.

Esta demasiado asustada le agradeció tan noble acto-"Mu-muchas gracias S-Señor Demonio radio"-Dio una pequeña reverencia y salió huyendo de ahí.

Alastor rio ante el miedo de la pequeña.

Por lo mientras el otro exterminador seguía conciente a duras penas, solo esperando el momento para poder dispararle a Alastor...

Este lo hizo, del arma que pudo tomar momentos antes sin que Alastor se diera cuenta salió una bala en dirección al poderoso demonio, este estaba de espaldas hacia el.

*bang*

La bala estaba por atravesar la cabeza de Alastor cuando este en un par de movimientos rápidos tomo la bala con uno de sus tentáculos.
Este soltó una gran carcajada y se giro hacia el ángel que agonizaba en el suelo.

Tentación a pecarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora