"Tu libertad es mía"

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*Narra Demián*

-le di una fuerte bofetada que resonó por la habitación. -Jódete Samuel, no tienes porque interferir en mi vida privada. -su mirada poco a poco volvió a centrarse en mi.

Sus orbes ardían de furia.

-Recuerda bien esto Demián -sujetó mis brazos estampandome contra la pared. -, tú provocaste esto. -por primera vez en toda mi vida, visualicé sus orbes carmín con temor.

Estampó sus labios contra los míos.

Abrí los ojos atónito, ¿qué demonios está pasando?. Intenté apartarlo pero era inútil, cualquier fuerza que ponía era sobrepasada con el triple de la suya torturando mis brazos. -Mngh... -jadeo con esmero en busca de oxígeno, este idiota está metiéndose con algo que ni siquiera comprende. -¿Qué demonios Samuel?. -solté agitado, me giró contra la pared en un acto rápido estampando mi mejilla izquierda contra la fría pared, paso mis brazos por detrás de mi espalda forzandolos con la suficiente fuerza como para inmovilizar me.

-Tú lo provocaste. -susurro en mi oído, un hormigueo recorrió mi espina dorsal, giré lentamente para intentar encararlo pero solo recibí una mordida en el cuello. Iba a gritar justo cuando insertó dos dedos dentro de mí cavidad bucal, ahogó cualquier tipo de sonido proveniente de mis cuerdas vocales, solo me quedaba resistir un poco para intentar tumbarlo.

Realmente no quiero hacerle daño salvo por la bofetada, pero, esto está mal.

-Déjate llevar, te prometo que será satisfactorio. -soltó con un tono candente mientras succionaba pequeñas partes de mi cuello.

-Mgh... -fruncí el entrecejo, tengo que liberarme de-- espera, ¿esta atando mis manos con su cinturón?. Giré la mirada en dirección a mis manos, definitivamente ató mis manos. Intenté zafarme pero la fuerza que puso en la atadura fue estremecedora.

-No podrás librarte Demián, tienes la opción de cooperar. -me inclinó separando mis piernas, pegó su abdomen con mi espalda y restregaba su miembro contra mi trasero, justo cuando pensaba que nada peor podría pasar, metió su mano en mis pantalones y masajeó mi miembro por encima de los bóxer. -Sacaré mis dedos de tu boca si cooperas, Demi. -asentí rápidamente, no voy a ceder pero al menos tratare de hacerlo entrar en razón.

Sacó ambos dedos.

-Jon... -solté agitado. -N_no puedes hacer es- ¡Aaww! -solté un gemido alto cuando apretó mis testículos, este tipo está estúpido. -¡Jon!. -emití notablemente cabreado.

-formuló una sonrisa maliciosa. -Te dije que cooperes. -iba a meter su mano dentro de mí bóxer cuando estampé mi cabeza contra la suya.

-¡Sueltame imbécil!. -formulé un grito estruendoso haciéndolo soltarme, conseguí zafarme de su amarre y me acomodé los pantalones.

Lo miré frívolo.

-No te acerques a mi. -amenacé con determinio para salir de su apartamento.

*Narra Jon*

-el sonido de la puerta siendo cerrada se escuchó violentamente. -... Imbécil.

[...]

|En la mansión |

*Narra Demián *

-caminé desde el apartamento de ese idiota hasta la mansión, no tenía derecho de meterse en mi vida personal, aún menos de hacer lo que hizo con mi cuerpo... aún menos de hacerme sentir de esta manera.

Las náuseas me ganaron haciéndome revolver el estómago.

Suspiré ingresando a la mansión, necesito alguien con quien desahogarme y la única persona con quien podía hacerlo es el causante de todo esto.

-Demián, ¿qué haces aquí?. -cuestionó mi padre, quien bajaba las escaleras listo para ir a la empresa.

-Nada, padre. -solté con seriedad para intentar pasar de largo directo hasta mi habitación.

-Deberías ir camino a tu escuela, no a tu habitación. -soltó con molestia.

-... No tengo ganas de ir. -solté frívolo.

-No empieces y arréglate, suficiente hago con pagar tus estudios como para que exageres. -salió de la mansión con un semblante molesto.

¿Por qué siempre dices que exagero?.

Me dirigí hasta mi habitación cerrando con seguro, Grayson ya no intenta hablar conmigo de mis problemas, Jason desaparece a mitad de la conversación en la que decido abrirme con el y, bueno, Drake no me tolera.

Estúpidas excusas.

Quiero romper en llanto justo ahora, quiero rasgar mi piel con algo, quiero salir huyendo de todo.

Pero mi madre no crío a un cobarde.

Idiota, no tenías que ponerme en esta posición.

•En Metrópolis•

*Narra Jonathan*

-tomé asiento frente al ventanal de mi apartamento, si, es verdad que desde que volví del futuro con unos años más de vivencia, me he convertido en alguien calculador, manipulador y dictador. Pero más que eso me he vuelto codicioso, ¿por qué no podría arruinar la amistad que mantengo con el?, si desde que lo conocí me tenía tontamente hipnotizado.

Oh mi lindo petirrojo, te voy a enjaular.

Me levanté en busca de mi traje con claras intenciones de hacer una visita nocturna a mi más amado aliado, hoy teníamos que patrullar y conociéndolo bien..., jamás se lo perdería.

Es lo único que lo hace sentir libre.

Pero si tengo que despojarte de esa libertad para tenerte conmigo, ten por seguro que lo haré. Te quitaré lo más preciado para ti, te voy a corromper hasta que encuentres consuelo en mi, te voy a enloquecer de amor. Por mi.

•En Blüdhaven•

*Narra Dick*

-apagué mi computador, finalmente daba por cerrado un caso que los titanes y yo llevábamos armando por más de dos meses. Ni siquiera le presté atención a ninguno de mis hermanos, ni siquiera a mi pequeño Demibird..., espero que no lo haya tomado tan personal como creo.

Llevábamos un buen avance.

Busqué su número entre todos mis contactos y le mandé un mensaje.

-Hola Demibird, ¿quieres salir mañana?.

Este usuario te ha bloqueado.

Que rara contestación. Esperaba un pudrete o vete a la mierda..., estamos progresando.

•En Gotham•

*Narra Demián*

-Tsk, ese idiota. -aventé mi celular a un lado del colchón. -Me ignora durante semanas y me habla como si nada. -abracé mis piernas en busca de consuelo, cerré los ojos con rudeza, tengo miedo de abrirlos.

¿Miedo?, ¿qué mierda Samuel?.

No sabía el nivel de tortura psicológica que un intento de abuso podía causar.

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Continuará...