- [En Edición] VENATUS AMORIS-

Godric Hollows

Disclameir: Por supuesto todos los personajes e historias son pertenecen a JK y a WB.

Porque los divorcios existen y la terapia de pareja no funciona

*Cursiva y negrita son Flash Back..

- VENATUS AMORIS-

Godric Hollows

- ¡No, No y No! eso ni lo pienses Hermione! - se escuchó exclamar a un exasperado Harry en la oficina de su abogado.

Harry había llegado temprano a las oficinas de su abogado, lugar en donde se reunirán con el abogado de Hermione y, lo más probable que con ella también, segundos antes de entrar al ascensor, vio a su novia sonreírle, sabía que ella quería estar presente en ese proceso, así que solo le tomo la mano, nuevamente en búsqueda de transmitirle la seguridad que ella necesitaba, pero que él no sentía.

Cuando ingreso a la sala de reuniones, desde la cual podías ver todo Londres, vio que Sirius ya había llegado, el animago lo saludo alegremente, pero respondió, mientras que Ginny le lanzó una mirada de odio fulminante.

-Veo que ya llego, señor Potter, ¿esperamos a alguien más? -preguntó Walter, el abogado de Harry entrando a la habitación.

-Si a mi clienta, debe estar por llegar- señaló Sirius sonriendo, mientras tomaba asiento.

-¡No debería demorarse tanto !-Exclamó Ginny molesta, sin soportar la idea de ver a Granger nuevamente.

-Gin-La llamó Harry, no quería que su novia se exaltara.

-Ginevra, acabas de llegar, y tampoco fue a la hora, así que no te entrometas en esto-señaló Sirius fríamente. No era sorpresa para Harry el modo en que su padrino trataba a su novia, pero nunca pensó que el rechazó hacia la pelirroja, lo llevará a cometer tal traición.

De repente se abrió la puerta, mostrando a una agitada Hermione, pero aun así, bella.

-disculpen la tardanza, había olvidado lo lento que puede ser el tráfico en Londres.

-No se preocupe, señora Potter-dijo el abogado de Harry, quien se ganó una mirada de desprecio de la pelirroja.

Hermione con elegancia, se sentó al lado de Sirius, vestía con unos jeans negros ajustados, y un blazer blanco y Harry podría jurar que estaba con la camiseta de Batman que él le había regalado. Luego de que tomara asiento, sintieron que alguien abría la puerta nuevamente.

-Permiso, Señora Potter, ya solucioné su problema, el ministro la espera a las dos de la tarde para almorzar y terminar de finiquitar sus asuntos.

-Gracias Melanie, si quieres puedes pasar, no creo que esto dure mucho- la castaña le indicó que se sentara en la silla desocupada a su lado. - ¡oh, por merlín que descortés soy, ella es Melanie mi asistente, y me estará acompañando en mi estadía en Londres- Hermione presento a una chica de estatura, media, casi del mismo porte de Hermione, colorina, no tanto como Ginny, de ojos verdes.

-Bueno, ya que están todos presentes podemos dar inicio a los trámites finales del divorcio-los llamó Walter. -Señor Potter, como le indique recientemente, he recibido los documentos firmados de su mujer, pero, debido a una cláusula de confidencialidad que me envió mi colega, hubo cierta información que no le pude dar ese día.

- ¿Y que sería?, ¿porque a estas alturas no me sorprende nada?-argumentó Harry mirando directamente a su padrino.

-La señora Potter, debido a las circunstancias de su separación, legalmente podría optar al 80% de sus propiedades, Señor Potter, si es que no más- dijo Walter, ganándose una mirada de incredulidad por parte de Harry.