Prólogo

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¿Que les puedo contar? Hace algún tiempo me di cuenta de que estaba viviendo en una mentira, que había dejado de vivir por mí, para vivir la vida de otros, que había dejado de ser yo para otros. No puedo negar que viví momentos de felicidad, pero esos momentos de felicidad se vieron opacados por todos esos de sufrimiento.

A mis 20 años, me casé con quien consideré siempre el amor de mi vida, mi mejor amigo, Harry Potter, pero él también fue mi mayor tristeza y decepción.

Fue mi error pensar que lo podía leerlo como un libro abierto, de esos que me fascinaban, pero lo di por sentado muy rápido y ese fue el peor error que puede haber cometido y lo peor que es que no me percate de ello hasta que fue muy tarde.

Han pasado seis años desde la última vez que lo vi en la Madriguera, cuando lo dejé allí mientras él creía que podía seguir engañándome. Ahora, vuelvo a Londres, vuelvo a vivir mi historia y por ese pasado que decidió volver en forma de avalancha.

-H&H-

-Hermione, ¿estás segura de la decisión que estás tomando? - le preguntó Natalie, su ahora mejor amiga, interrumpiendo sus pensamientos.

-Si, no hay nada por lo que preocuparse- respondió dejando la carpeta del Ministerio de Magia a un lado- si todo se hace de acuerdo al plan, es solo ir a firmar el contrato con el Ministerio, visito a mis padres, Remus y Sirius, firmó el divorcio, vuelvo a Nueva York, por las dos semanas que tenía comprometidas con anterioridad y vuelvo a Londres a capacitar al personal del Ministerio- terminó con una sonrisa y continuó con su labor.

-Parece ser que lo tienes todo bien calculado- señaló su amiga con un dejo de sarcasmo.

-Eso es lo que tengo que hacer, y sabes que no puedo eludir este compromiso con el Ministerio de Magia de Estados Unidos. Sabes que esta decisión no es mía.

-Lo sé- Contestó mientras se ponía de pie para seguir a su amiga que se movía constantemente por la oficina. Era claro que estaba nerviosa - Pero me preocupas y sé que volver allá no te hace bien.

Hermione se quedó quieta y tomó una fotografía que tenía sobre uno de sus muebles y la observó con añoranza y suspiró.

-Tenía que pasar algún día- indicó la castaña con pesar -Estoy consiente en que pude haber enviado los papeles firmados, sin tener que encontrarme con ellos, pero Harry nunca aceptara mis condiciones por carta, es demasiado orgulloso y llevado a sus ideas.

-Insisto en que no es la mejor opción... no puedes

-Te entiendo Nataly, pero por eso vas a acompañarme ¿no? - Le pregunto sonriendo levemente, mientras dejaba la fotografía en su lugar.

-H&H-

Londres en otoño es una ciudad fascinante, la luz de la ciudad le da un nuevo brillo, con su suave lluvia encanta a quienes viven ahí, la visitan o vuelven a reencontrarse con su pasado.

La Hermione que volvía a Londres no era la misma Hermione a la que su marido pasó a llevar y utilizó a su conveniencia. Los años no habían pasado en vano y no iba a permitir que la dañaran nuevamente.

-H&H-

- [En Edición] VENATUS AMORIS-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora