CRISIS EN TIERRA APOCALÍPTICA (AU Supercorp/Clexa)

Sentimientos y culpa

Septiembre 23, 2018. Mansión Luthor.

Un mes había transcurrido desde que los superfriends llegaron a la mansión Luthor. Los primeros días fueron un tanto difíciles para el equipo debido a la nueva rutina de vida, claro que no se quejaban en lo absoluto ya que desde que salieron de sus hogares el grupo de amigos nunca habían estado tan cómodos en un lugar. Con el paso de los días los Luthor y los super amigos empezaron a llevarse mejor que nunca y el que existiera integrantes amantes por la ciencia había ayudado mucho a decir verdad.

Lilian les informó acerca de la investigación que ellos habían realizado y les hablaron sobre su descubrimiento. Para los super amigos fue muy abrumador saber que la aparición del virus no había sido coincidencia, los Luthor confirmaron que el D.V-17 fue creado en algún laboratorio ¿La razón? no la sabían, erradicar la sobrepoblación, arma biológica para el gobierno o simplemente errores de cálculo solo eran teorías; aún así la noticia fue dolorosa. Caitlin, Cisco, Felicity, Winn y Alex eran los que trabajaban en el laboratorio junto con Lena, Lex y Lilian; todos ellos compartían la misma pasión y respeto por la ciencia. Lena estaba contenta con sus nuevos compañeros de laboratorio, eran como sus hermanos nerds adoptivos; claro que también se llevaba muy bien con el resto del equipo, en especial con cierta rubia con gafas de ojos azules.

Aunque existía cierto conflicto en su interior que le impedía llevarse del todo bien con James y Mike; estos dos hombres no le agradaban para nada, el primero de ellos estaba más que claro que era un idiota, James siempre se la pasaba coqueteándole descaradamente y aunque ella se mostrara reacia a su actitud éste parecía no importarle su rechazo por lo que nunca desaprovechaba la oportunidad de insinuarse.

Mike por otro lado...bueno, Lena no tenía quejas sobre él, el hombre era en lo absoluto una miel. Era servicial, amable y se llevaba bien con todos pero no podía evitar detestarlo cuando lo veía cerca de Kara. A medida que avanzaban los días ella y Kara se habían hecho muy buenas amigas, le había cogido un cariño especial a la rubia y sabía que le gustaba más que solo como amiga por eso, cada vez que veía a Kara junto a Mike le entraban celos enormes; Lena sabía que en un tiempo atrás Kara gustaba de Mike, ella se lo había confesado accidentalmente cuando estuvieron tomando un par de copas en el despacho, la rubia había dicho que lo había superado pero la ojisverde nos estaba tan segura de ello.

Lena se levantó ese domingo por la mañana con más cansancio que nunca, había dormido pocas horas debido a las pesadillas que en ocasiones perturbaban el poco sueño que lograba conciliar. Tras asearse se dirigió al laboratorio para retomar el trabajo del día anterior, junto con Felicity habían estado planeando cómo aprovechar al máximo el acceso a los servidores de Luthor Corp; Sam había tenido razón después de todo, los servidores aún funcionaban gracias a la planta de energía y al avanzado sistema de operaciones de éste, era una pena no haber podido contactar con alguien de la empresa pero era un alivio saber que ahora contaban con su tecnología y no desaprovecharían usarla para su beneficio antes de que la planta dejara de funcionar por falta de mantenimiento. Al llegar al laboratorio se encontró a Cisco trabajando en los nuevos radios que estaba fabricando con Winn.

—¿No se supone que sigues betada del laboratorio?- preguntó Cisco tras ver a la ojisverde entrar por la puerta.

—Buenos días para ti también, Cisco.- contestó Lena rodando los ojos. -Mi madre no tiene por qué enterarse que estoy aquí.- dijo ella llegando hasta una de las mesas para revisar los archivos en los que trabajaba. Lilian le había prohibido acercarse al laboratorio hasta nuevo aviso argumentando que debía descansar, la ojisverde había tenido un colapso nervioso hace un par de días debido a estar la mayor parte del día en el laboratorio trabajando tanto en establecer conexión con los servidores como tratar de avanzar en la investigación de una cura para el virus. Desde entonces su madre le prohibió entrar al laboratorio y hacer cualquier trabajo que implicara exceder esfuerzos a su cerebro. —Creí que Felicity te lo había dicho.