Mala Elección [Libro 2]

13: "Rescate"

Mitchell.
  
   

Dos días antes...
    
    
  

El nivel de estés ha estado más arriba de lo normal, pero tomando en cuenta que Camille y Riley fueron secuestradas es lógico que todos estemos tensos. Me esfuerzo por buscar alguna pista, algo que nos guíe hacia su paradero, pero me frustro más a cada momento al no encontrar nada. Otra vez.

Bombón y Caramelito son muy importantes para mi, ellas son familia y a la familia jamás se le abandonar. Si, estoy preocupando por ellas y molesto por toda ésta situación de mierda, pero nada de lo que pueda estar sintiendo ahora se compara con cómo se siente Colton en estos momentos. Es uno de mis mejores amigos y puedo ver lo mal que está, y no puedo decirle algo que pueda hacerlo sentir mejor porque, ¿Qué puedes decirle a un hombre que prácticamente escuchó cuando se estaban llevando a su novia e hija? No hay nada que pueda consolarlo, así que mi única manera de que sepa que estoy para él es jodidamente moviendo todas las fichas que tengo a la mano para ayudar.

Era nuestro trabajo encontrar a Ian Cooper, pero al parecer fue él quien dió el jaque en este maldito juego de ajedrez, pero aún tenemos jugadas y Cooper no se saldrá con la suya. No es demasiado tarde, no lo es.

Entro en la oficina de Henry, quien se encuentra mirando algo en su laptop.

—¿Me mandaste a llamar?

No sé para qué pregunto, si ya sé la respuesta.

—De hecho, sí.— suspira.— ¿Hay avances?

—Tenemos en la mira posibles casas de seguridad, pero fuera de eso...— sacudo la cabeza.

—Nathaniel está mal.— no es pregunta, pero igual le doy toda la razón.— ¿Y tú? Sé que ella también es importante para ti, es tu amiga.

—Es amiga de todos nosotros.— me siento frente a él sin pedir permiso.— Pero el haber convivido tanto tiempo con ella durante mi recuperación la volvió otra mejor amiga, y Riley...

—Mi nieta.— se pasa las manos por el rostro, frustrado.— Aunque no lo creas estoy preocupando... Por ambas.

Le doy una pequeña sonrisa.

Henry fue injusto con Bombón desde el primer instante, nunca se dió la oportunidad de conocerla de verdad, en realidad su verdadera convivencia inició hace un par de meses atrás y lo estaban llevando bastante bien, supongo que eso se debe a que él está tratando de forma profesional todos sus problemas. Fuí yo quien le consiguió cita con un psicólogo y hasta donde sé, todo va en orden.

Esto es algo que no sabe Nate ya que Henry no ha querido decir nada, pero me he encargado de apoyarlo incondicionalmente, tal y como él lo ha hecho conmigo en mis peores momentos.

—Sé que lo estás, no tienes que convencerme de eso. Pero no estás para tantos trotes, ¿Lo sabes, cierto?

—¿Me estás llamando viejo?

Me encojo de hombros.

—Tal vez un poco de forma indirecta.

—Indirecta, claro.— rueda los ojos, pero la verdad es que si se ve muy cansado.— Tengo planeado ir al cementerio en un par de días.

—¿Le llevarás girasoles está vez?

Henry me da una débil sonrisa y asiente.

—Sí, la última vez le lleve margaritas, mi esposa amaba todas las flores, no tenía favoritismo hacia algún tipo en específico.— eso es algo que ya sabía, pero no digo nada.