21: "Enfrentar"

833 59 28
                                    

Mitchell.

  
   
  
  
¿Por qué me afecta?

No debería sentirme así, no debería... No debería sentir nada en lo absoluto, pero lo hago.

Necesito volver a poner todos los sentimientos negativos devuelta en su jodida caja y no volver a dejarlos salir, porque el tema de mis padres biológicos está más que superado y, como la mayoría de los casos en los que trabajo, también está cerrado. No quiero nada de eso en mi vida, no ahora de todos modos. O nunca.

He pasado años ignorando la existencia de Bárbara y Patrick Roberts, negándome a verlos cada ver que intentan contactar conmigo... Porque sí, es algo que no le dije a mi Solecito, pero ellos por lo menos dos veces al año envían un intermediario para convencernos de ir a conocerlos. Me extraña y fastidia que no hayan perdido las esperanzas luego de recibir tantas negativas de mi parte.

No sé si es un estúpido juego del destino o solo es Dios queriendo ponerme una de sus muy difíciles pruebas, pero es demasiada jodida casualidad que precisamente hoy, que recibo un correo electrónico de parte de los Roberts pidiendo conocerme una vez más, mi Solecito decida sacar a colación el tema de mis padres biológicos.

¿Qué tan mala suerte puede tener una persona? Porque creo que yo me llevo el premio. Ahora resulta que tengo hermanos menores, y uno de ellos no es más que el mismo imbécil vecino de mi Solecito, es decir, su exnovio.

Claramente hay muchas cosas mal aquí.

En la estancia de mi apartamento y con mi laptop sobre las piernas, leo una vez más el maldito correo de los Roberts, ésta vez no fue enviado de una cuenta alterna por el intermediario de siempre, no. Al parecer este fue escrito por la misma Bárbara Roberts, eso me sorprendió mucho al principio.
   
   

  
  
De: Bárbara Eva Roberts.
Para: Mitchell Jerry.
Asunto: Por favor.

No sé qué decirte con exactitud, la verdad es que nunca he sido buena con las palabras, pero juro que de verdad me estoy esforzando porque lo que más quiero es poder conocerte. He estado esperando hacerlo por mucho tiempo, pero tú solo te niegas y lo entiendo. Tal vez te herí al darte en adopción cuando naciste, pero tuve mis razones para hacerlo. El que tuviera que entregarte no quiere decir que no me haya dolido, Mitchell, porque lo hizo como no tienes idea.

Han sido casi veintiséis años preguntándome: ¿Qué ha sido de mi bebé de hermosos ojos? ¿Alguna vez podré conocerlo? ¿Cómo será?

Así que, por favor, Mitchell, danos la oportunidad. Te queremos ver, conocerte y, si es posible, abrazarte. Porque a pesar de lo que puedas pensar, nosotros te amamos y jamás dejamos de pensar en ti. Solo queremos contarte nuestra parte de la historia, tal vez así nos puedas entender, pero no te cierres a esto, deja de rechazarnos, porque no importa el tiempo que tenga que pasar, no me rendiré. Nunca lo haré.

Porque una madre nunca se rinde.

Espero que puedas responder.

  
  
Bárbara Roberts (tu madre).

   
   
  

Mi madre...

Bufo y cierro la laptop, una vez más, sin contestar el correo.

Desearía que Henry estuviera aquí, él sabría qué decirme, la verdad es que sus consejos me hacen mucha falta... Siempre fue bueno para guiarme en mis peores momentos. Supongo que ahora solo debo tomar las riendas por mi mismo y decidir qué demonios hacer, si tan solo eso fuera tan fácil no estaría en este dilema. Todo esto es estúpido, ¿Por qué no puedo simplemente redactar un corto correo con la respuesta: «no estoy interesado», y dejar el asunto atrás? No entiendo qué me está pasando, ¿Enterarme de mi parentesco con el exnovio de Aurora tuvo algo que ver? No lo sé, tal vez.

Mala Elección [Libro 2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora