Indra y yo bajamos de la limusina, ambos vestiamos traje saint laurent, zapatos Italianos y costosos relojes de oro puro.
El evento anual de mi padre era la jodida ocasión, dijo que teníamos que ir, dejar que la prensa nos tomara fotografías, para la Forbes una entrevista, dijo que debíamos parecer ser perfectos o al menos fingir serlo.
Los hijos de Hagoromo Õtsutsuki, los perfectos herederos.
Si tan solo supieran.
—La chica rubia que acompaña al anciano es Gia, escuché que papá está interesado en hacer tratos con su padre, son dueños de una mina de litio en China.— comenté para después llevar la copa de champagne a mi boca.
—¿Y que con eso?— cuestionó mirando en la dirección que le había indicado.
— El litio es algo así como el nuevo oro, el anciano no hace negocios a menos que se trate de familia, nosotros no somos familia pero eso se arregla fácilmente, tú eres el primogénito, quien se encargará de todo.— yo comencé a reír.— papá te hara casarte con esa mujer, es hermosa y elegante, además no tiene ningún problema con sus padres.
Indra dió la media vuelta y comenzó a caminar hacia la salida del lugar, termine el contenido de mi copa y lo seguí.
Él esperaba en su auto, tome el lugar de copiloto, los flashes de las cámaras dificultaron un poco el camino pero logramos alejarnos seguidos de nuestro equipo de seguridad.
—Sabes que papá va a estar furioso, nos fuimos antes de que pudiera presentarte a tu hermosa prometida.—me burle de él, tome asiento en uno de los sillones de exterior que se encontraban en la terraza.
Indra se quitó el saco, la corbata y finalmente desabotono su camisa, una de las empleadas acerco dos botellas de Ron, vasos y hielos, comenzamos a beber.
—A la mierda el Litio, papá ya tiene suficiente dinero, no pienso casarme con nadie.
—Puedo encargarme si es lo que quieres.— saque una píldora de la caja metálica dentro de mi saco y la metí a mi boca.
—Y dejarte que jodas las cosas aún más, eres imprudente Ashura, actuas sin pensar en las consecuencias.
—Es más divertido así, le da emoción a mi vida, la adrenalina, el peligro...aleja la soledad, sabes a lo que me refiero.— recargue mi espalda en el respaldar del sofá, eche la cabeza hacia atrás.— el otro día dijiste que la puta no olía a ella...¿Cuál es su olor?
El silencio fue largo, la droga hizo efecto, los colores vinieron a mi, el vacío se llenó con la fantacia, con la alucinación, un color en especial.
—Eso es algo que no te diré, arregla el asunto de papá y el litio, estoy cansado de esto Ashura.— escuché a Indra hablar, sonreí sin abrir los ojos.
— No eres el único que está cansado.
No hubo respuesta, la soledad fue mi compañera después de que Indra ingreso a la casa, y todo volvió a mi.
El recuerdo de mi madre con una botella de alcohol en su mano derecha, un cigarrillo en la izquierda, llorando por toda la casa, en Madrid éramos ella y yo, sus padres la echaron después de que ella se metió con un hombre casado, Hagoromo compro un departamento, nos visitaba una vez al mes, ella le rogaba por amor, el simple se negó a amarla o si quiera intentarlo, la decadencia se adueñó de mi madre.
—Mama...tengo hambre.
—Te dije que no me molestaras, dile a la Nana que de algo.
—Tu despediste a la Nana, no hay nadie más, tengo hambre.
—¡Que te largues!...¡Lárgate con un demonio!
Y con el estómago vacío regrese a mi habitación, el llanto de mi madre hacia eco en mis oídos, de pronto un día mamá decidio que debía ser su compañero de fantasias, tenía tan solo cinco años cuando una píldora se alojó debajo de mi lengua, mamá dijo que eso me quitaría el hambre, mamá decía eso cada vez que me daba una píldora.
—Esto nos ayudará a ser felices, esto nos trae paz al corazón, cierra los ojos Ashura y piensa en lo que más anhelas tener pues la píldora te lo dará.
Y lo hizo, mi madre me amaba cada vez que tomaba la píldora, comíamos galletas, cocinaba para mí, me arropaba antes de dormir, mi madre me amaba cada vez que me drogaba.
No había miedo.
No había llanto.
No había hambre.
Solo era feliz, un niño de cinco años siendo feliz.
Pero todo era efímero pues cuando el efecto pasaba, yo solo no entendía, mamá comenzó a ser violenta, agresiva eso después de que Hagoromo dejo de visitarnos, el solo dijo que estaba arto de ella y mamá enloqueció, tomo todas las pildoras y una botella entera de alcohol.
—Ire a ser felíz, cerraré mis ojos y seré feliz, no intentes despertarme.
Y no lo hice, espere afuera de su puerta toda la noche, todo el día siguiente a ese, tenía hambre, mi cuerpo temblaba, me sentía muy mal...llamé a emergencias tal y como había visto en las películas, ya no había más píldoras de felicidad pero si había un frasco entero de píldoras para dormir, mamá las tomaba a diario, creí que ayudaría si a mamá le ayudaba, las tomé y después solo mis ojos se cerraron, creí que sería feliz pero desperté tres días después en un hospital, la garganta me dolía, una aguja yacía en mi brazo, no entendí que era lo que estaba pasando.
Y nunca lo entendí pero tampoco pregunté, supe que mamá no volvería cuando Hagoromo dijo que viviría con él, dijo que no dijera a nadie que él era mi padre, dijo que él se encargaría de eso después.
—Indra, el es Ashura, es más pequeño que tú, apartir de ahora te hará compañía, cuida de él.
Ese fue el día que conocí a Indra, el era un par de años mayor, su rostro siempre estaba inexpresivo, igual que él mío, el silencio fue nuestra compañía, teníamos toda clase de juguetes, toda clase de lujos, sirvientes a nuestra disposición, dinero a manos llenas, pero nada de eso era importante.
Indra lloraba todas las noches, yo gritaba cada vez que soñaba con mi madre y eso era a diario, pronto Indra y yo nos dimos cuenta de que teníamos más cosas en común de lo que imaginamos, pronto nos dimos cuenta de que éramos solo él y yo.
Puccalovelin.
Voten y comenten no sean ojeis 😂😂😂.
