young and beautiful | martuli. (TERMINADA)

XXI

"The Bleeding Heart Show" by The New Pornographers

Martina no ve a Lourdes al día siguiente.

Llega para su clase de tutoría temprano, sus dedos adormecidos por la ansiedad. Había estado pensando en este momento durante todo el día, durante todas sus clases que parecían nunca acabar y sus conversaciones a medias. A través de cada nota garabateada, cada vuelta de página de sus libros de texto, y cada intento de ignorar los rumores susurrados a su alrededor que involucraban a las chicas (en un punto una chica con aire de suficiencia dijo a su amiga que Brisa y Lourdes se habían agarrado a los puñetazos por ella-Martina resopló tan fuerte que el profesor hizo una pausa, a mitad de la frase, sobresaltándose), les prestaba sólo la mitad de su atención, sus pensamientos y los latidos de su corazón atrapados en algún lugar dentro de las habitaciones de Lourdes, agitando las preguntas sin respuesta que goteaban de su lengua. De hecho, había estado tan ansiosa por la sesión de hoy con Lourdes, que incluso rechazó la invitación de Megan de comida y vino en su restaurante favorito. Era así de grave.

Pero ahora ha llegado y cuando Martina trata de abrir la puerta de Lourdes, está cerrada.

Y cuando Martina llama, nadie abre.

Y cuando Martina textea '¿Dónde estás?' se queda sin respuesta.

Y así las entrañas de Martina se desinflan.

Y camina de regreso a su apartamento, la decepción y una nueva sensación de temor instalándose en sus huesos y torciendo los pelos en la parte posterior de su cuello.

Excelente.

**

"Si llega a desaparecer de nuevo, ¡que Dios me ayude!" Martina saluda estruendosamente en cuanto entra al piso.

Megan levanta la vista de su batería, su gran suéter pálido arremangado hasta los codos, con las baquetas por encima de su cabeza, listas para caer. "¿Eh?" Pregunta, desviando su atención.

"Lourdes. No está en sus habitaciones. Se ha ido, ¿no? Se ha ido de nuevo, y todas vamos a simplemente sentarnos a lucir bonitas mientras ella está ahí fuera en una zanja en alguna parte, probablemente muerta, y nadie va a-"

"¿De qué coño estás hablando, compañera?" Megan pregunta, su cara completamente desconcertada mientras se deshace las baquetas, arrojándolas a un lado, y presta toda su atención a una muy nerviosa Martina-que ahora está sacándose la chaqueta con más fuerza de la necesaria.

Tal vez está demasiado nerviosa. Por la ansiedad y todo eso.

"¡Voy a mensajear a Brisa!" Martina dice de repente a nadie en particular, una bombilla de luz se prende por encima de su cabeza. Se dirige a la habitación de al lado, quitándose los zapatos mientras camina y dejándolos esparcidos por el suelo.

"¿Qué cosa?" Megan grita.

"¡Que Lourdes ha desaparecido!"

'Dónde está Lourdes?' teclea sin piedad en su teléfono, a una velocidad alarmante.

"Deberías dejarla en paz," Megan comenta, recogiendo una de las baquetas olvidadas, haciéndola dar vueltas entre los dedos.

"¡Demasiado tarde!" Martina canturrea. Revolotea de nuevo en la sala, ahora adornado con una sudadera y se queda mirando con avidez a su teléfono, ya que acaba de vibrar.

La respuesta:

'No sé colega.'

"Por el amor de Dios," Martina resopla, rodando los ojos con exasperación mientras lanza su teléfono sobre la superficie más cercana. "Por supuesto que no lo sabe. ¿Alguien sabe algo por aquí?" Exige. Entonces pasa como una tormenta de nuevo hacia su habitación.