𝘾𝙝𝙪𝙘𝙠𝙮 || ❛ᴊᴀᴋᴇ ᴡʜᴇᴇʟᴇʀ x ᴅᴇᴠᴏɴ❜ ᴏɴᴇ-sʜᴏᴛs [ᴊᴀᴠᴏɴ]

ঔৣ|❝ᴀɢᴀʀʀᴀᴅᴏs ᴅᴇ ʟᴀs ᴍᴀɴᴏs❞

Un nuevo día se presentaba para Jake, mientras caminaba por las lindas calles de Hackensack escuchaba el nuevo podcats de Devon Evans. Últimamente no había otra cosa que escuchaba a parte de eso.

Su cabeza aún no le dejaba de hacerle malas bromas, después de todo lo sucedido con Chucky el adolescente creía que ahora que estaba muerto podría volver a la normalidad, pero aveces el destino te juega malas jugadas.
Llegando a la entrada del colegio, se topó con Lexy y Junior, la relación con ambos no era la mejor enespecial con la rubia por su intento de matarla pero al menos había logrado agradarlos.

- Jake - Saludo Junior con una sonrisa.

- ¿Qué tal, Jake? - Preguntó Lexy.

- Todo bien - Respondio el chico acercándose a la pareja. - ¿Sigues molesta? - se dirigió a la chica.

- Por tu inútil intento de matarme con ese muñeco espeluznante? No tanto, la verdad.. lo tenía un poco de merecido.

Aclaro Lexy con algo de culpa mientras guardaba su celular y tomaba la mano de Junior. Este solo escuchaba atentamente la conversación, recordar todo el asunto con aquel muñeco aún le causaba escalofríos y pensar que estuvo a punto de matar a su novia. Se culpaba al no haberle creído cuando esta le dijo sobre Chucky.

- Yo.. quisiera disculparme. Esta vez enserio - Solto la chica, Jake solo la miraba curioso - la última vez que lo hice solo fue para que me dieras a Chucky y no lo dije de verdad. Así que lo siento en verdad, nunca quise hacerte sentir mal de alguna manera, bueno, talvez si pero no sé. Lo lamento.

- Está bien. Yo también me equivoqué al intentar asesinarte, ¿sin resentimientos? - sonrio.

- Claro - Le devolvió la sonrisa para irse con Junior.

Jake siguió su camino, el bulling que recibía por parte de sus compañeros había disminuido aunque aún quedaba uno que otro que lo seguía haciendo.
Mientras se acercaba a su casillero pudo notar un papel pegado en la puerta, se acercó para tomarlo y ver que decía "te espero después de que salgas de clases a unas cuatro calles de aquí, porfavor ven".

- Que raro - Dijo para si mismo en un susurro, una parte de él le decía que no valla pero otra le decía que si.