Déjame morir [En Edición]

IX. Momento inesperado

*Narra Maddy*

Estoy acostada en mi cama mirando el techo de color azul. ¿Es posible estar enamorada de alguien a quién acabas de conocer?, ¿es posible vivir enamorada de una persona muerta?, ¿es posible tener a dos personas en tu corazón? No lo sé, y no quiero conocer la respuesta. "El destino quiere que te des una nueva oportunidad para olvidarlo." Dice una pequeña voz en mi cabeza. El destino, ¿es en serio? El destino es igual que la perfección, no existen. Solo son una utopía que nos ha hecho creer nuestra mente. De repente, alguien llama a la puerta y yo me siento en la cama inmediatamente.

-¿Quién es?- pregunto atemorizada, Azul nunca llama a la puerta antes de entrar.

-Soy Jhony, tía- al escuchar su voz alegre y dulce me relajo un poco.

-¡Adelante!- respondo de vuelta y él entra, camina hasta donde estoy y se sienta a mi lado.

-Ray está abajo. Vino a verte. ¿te sucede algo?- me mira y pregunta con un tono de preocupación en su voz. ¿Acaso ahora todos se preocupan por mí?

-Vamos, Jhony, ¿parece que estoy bien? Digo, solo mírame. Estoy confundida. No sé. Creo que quiero a Ray, pero...- me quedo a media oración, no salen las palabras por más que quiero decirlas.

-Pero también seguís queriendo a Benjamín, ¿cierto?

-Si, creo que si. Y no sé que hacer- digo melancólicamente y bajo mi vista hacia el suelo.

-Si me permites, Nai, creo que deberías de olvidar a mi primo, él ya está... muerto- me abraza por los hombros mientras yo lo miro a los ojos. Noto tristeza en su expresión. Su boca se abre un poco, pero vuelve a cerrarla son haber mencionado palabra alguna.

-Olvidar no es fácil. No se olvida de un día para otro, a menos que nunca hayas querido a esa persona especial, Jhony. Y sobre lo que me dijiste la otra vez, también me atraes un poco- y también lo abrazo.

-Eso es una buena noticia, Maddy, yo creo que necesitas darte una nueva oportunidad para ser feliz. Intenta olvidarlo, conoce gente, besa a muchas personas, ten sexo todas las noches, vuelve a vivir. No puedes quedarte aplastada eternamente por la melancolía- y sonríe.

-Carajo, Jhony, tienes razón. Mi plan de vida era vivir deprimida, soltera, loca, amargada, gorda, fea y con 90 gatos- digo sarcásticamente.

-No necesitaba tu sarcasmo, niñata. ¿Sabes? Hace mucho tiempo decidí hacer las cosas que antes no me atrevería a hacer. Y tengo ganas de hacer algo desde hace mucho- me mira y sonríe esperando una respuesta.

-¿Y por qué no lo haces? Digo, si tienes ganas de hacerlo no vas a pedir permiso para hacerlo, es tu vida y la vivirás como quieras vivirla. Sólo...

-Sólo cállate y bésame-  me interrumpe. Y me besa. Me besa como nadie antes lo había hecho. Su boca sabe a mango dulce. Me dejo llevar y también lo beso. Ambos cerramos los ojos. Deslizo mis manos por su cuello y enrollo mis dedos en su cabello, atrayéndolo más hacia mi. Él lleva sus manos de mis hombros hasta mi cadera y sonríe mientras nos besamos.

-Al fin me atreví a hacerlo- dice cerca de mi boca antes de volver a besarnos como antes.