XI. Corazón de mierda.

85 1 1
                                    

*Narra Ray*

-Dos semanas después-

Maddy y Jhony están a medio patio, ríendo fuertemente y con las chicas y con los nuevos. Ellos dos se han vuelto inseparables desde aquel día que los encontré besándose, parecen muy a gusto cuando están juntos. Eduardo, que está a un lado de ella, parece un poco incómodo. Tal vez no soy el único al que le rompieron el corazón. De cualquier forma, mis esperanzas siguen vivas.

-Ray, ¿que os sucede, tío?- pregunta Emir mientras llega a sentarse a mi lado, estamos en la banca de las jardineras. Aparto la vista de Maddy y Jhony, y volteo a mirar a mi amigo.

-Nada, no me pasa nada, como siempre. Ya sabes que me hace feliz ver a Maddy con mi primo, eso es todo- respondo melancólicamente y con un nudo en la garganta. Emir solo se limita a mirarme y darme unos golpecitos en la espalda.

-Déjala vivir. Déjate vivir. Deja vivir- dice después de unos minutos en completo silencio.

-¿Qué quieres decir con eso?- pregunto confundido.

-Que pase lo que tenga que pasar, Ray. Si realmente tú y ella tienen que ser novios, lo serán. Si no, pues no hay nada que puedas hacer contra el destino-dice con una sonrisa-.  Por ejemplo, Helena y Naroa, se odiaban a muerte esas dos, pero al final ¿qué pasó? Hicimos que se conocieran y ahora miralas, son tal para cual- termina y vemos a las dos chicas que están tomadas de las manos-. El amor, amigo mío, es capaz de cambiar a cualquier persona. Llega en el momento en el que menos te lo imaginas y ¡pum! Cuando menos lo sientes ya estás enamorado. El amor, amigo mío, es hermoso cuando lo aceptamos. Ah, el amor- termina con un suspiro y mirando al suelo sonriente.

-Me encanta cuando hablas así, Emi, como las palabras salen de tu corazón de una forma tan hermosa- le digo alegremente y cuando volteo a verlo, me está mirando con cara de asco.

-Eso es lo más gay que he escuchado en mi vida, Ray- me responde y comenzamos a atacarnos de la risa. De repente, Maddy y Denisse pasan frente a nosotros y van a cafetería, dos segundos después se oye gritar a las chicas que están con Jhony. María sale corriendo emocionada hasta donde estamos Emir y yo.

-¿Ven? Jonathan es un romántico de primera-dice mientras se sienta a mi lado-¿Saben? ¡Quiere pedirle a Madu que sean novios!-grita emocionada.

-¿Madu?-preguntamos los dos al mismo tiempo, María nos ve y comienza a reírse.

-Así le decimos nosotros, jaja, por dios, parecieron hermanos.

-¿Qué sean novios?- pregunto con curiosidad.

-Si, y lo mejor es en la forma en lo que se lo va pedir-responde ella con la misma emoción.

-¿Cómo se lo va a pedir?-pregunta está ves Emir.

-Va a llevar a su casa un cartel gigante con frases de libros y en el centro un "¿te gustaría crear nuestra propia historia?" y le llevará un megaramo de margaritas, ¿acaso no es hermoso?- dice casi llorando. Yo solo me limito a ver a María y después llevó mi vista al suelo. Dos segundos después, pasan Maddy y Denisse nuevamente.

-Mary, vámonos- dice secamente Maddy muentras me fulmina con la mirada. ¡Maldita sea! ¿Jhony le habrá dicho algo sobre el accidente? Con un carajo, no podré saberlo.

-Claro, Madu. Luego nos vemos chicos- se despide María y yo llevó mi mirada al suelo, nuevamente.

-¿Ray?- escucho decir a mi amigo y me coloca una mano en la espalda.

-Al diablo con todo, Em- es lo único que puedo decir antes de levantarme. Siento un maldito nudo en la garganta y creo que mis ojos se han puesto cristalinos.

>>Al carajo con todo.>> Pienso. >>Por mi que se los follen. Corazón de mierda que tengo.>> Y me voy, salgo de la escuela dejando a Emir solo en la banca, volteo a ver a Maddy y ella está abrazando a Jhony.

       ************************

-¿¡Qué!? ¿¡QUE JHONY HARÁ QUE COSA!?- grita Azul antes de levantarse como loca de la cama. Está demasiado exaltada.

-Lo que escuchaste, Zu. Le pedirá a Nai que sea su novia- respondo aún llorando, tengo la voz ronca y me siento cansado.

-¡Pero no puede hacer eso! Se supone que él te ayudaría a que tuvieras una oportunidad con ella, no que él tuviera la oportunidad. No, sabes que, al carajo, tengo que verlo- termina diciendo mi hermana antes de tomar sus cosas y salir de mi casa. Intento detenerla pero me es imposible. Parece que es de familia estas reacciones.

Ha sido un día muy cansado así que decido ir a dormir.

Déjame morir [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora