German POV
-Hoy veremos los anhídridos- anuncio la profesora Carrara mientras escribia el titulo en la pizarra con su femenina y legible letra.
En ese momento el sonido de hojas volteándose resonó en el ambiente, junto con el sonido de lápices escribiendo en el papel, haciendo friccion contra este. Todos a mi lado estaban sacando sus cosas, entretenidos con tener todo lo necesario para trabajar. Angie comenzo a dictar, dando la definición básica del tema mientras todos lo apuntaban. Debido a que el salón era grande y la resonancia era mala, la casta;a prefirió apuntar la definición en el pizarrón para que todos pudiéramos leerla. Observe su mano garabatear sobre el blanco lienzo y en ese momento mi cerebro se desconecto.
-German creo que la definición esta apuntada un poco mas arriba- murmuro Ramallo inclinándose en su escritorio detrás mio para poder alcanzar mi oído.
Al escuchar su voz agite la cabeza un par de veces, volviendo a la realidad. Rápidamente tome el lápiz y empecé apuntar en la blanca hoja de papel. No sabia ni cuanto tiempo habia pasado desde que me habia quedado hipnotizado viendo a la profesora escribir.
-Como?-le volvi a preguntar sin haber escuchado lo que recién acababa de decir.
Mi amigo chasqueo la lengua y se inclino aun mas para que nadie escuchara lo que me diría.
-que si vas a verle el trasero a la profesora minimo tene algo de disimule, German- repitió el.
Si hubiera tenido algo en la boca de seguro la escupo y me atraganto. De inmediato un calor invadio todo mi cuerpo y pude sentir como se concentraba en mis mejillas, sonrojándome. Sin poder evitarlo dirigi mi mirada hacia donde mi amigo recién acababa de mencionar y me di cuenta de que evidentemente estaba bue….
-Yo no le estoy viendo el trasero!- menti girándome levemente para ver a Ramallo y hablarle entre dientes.
-Pues infórmaselo a tu cara pues estoy apunto de pasarte un balde para la baba. Además Olga ya lo noto también.
Gire mi cabeza hacia la derecha, en donde estaba sentada mi mejor amiga viéndome con mirada de desaprobación y negando con la cabeza. Apenado frunci el se;o y decidi ignorarlos a ambos. "Que culpa tengo yo de que ese pantalón le quede mas apretado de lo debido" pensé hundiéndome en la silla y volviendo a ver esta vez al pizarrón.
-German.
En ese momento todo se me revolvió por dentro. Como llevado por un iman levante la mirada y me encontré con que ella me estaba llamando. Cualquier otra persona podria decir mi nombre pero solo cuando ella lo decía causaba un sentimiento indescriptible. Sin decir nada sentí una emoción por dentro al saber que ella me habia llamado por mi nombre y no por mi apellido.
-Si?-conteste algo distraído pues al recordar lo que habia hecho minutos antes no pude evitar quedarme un poco atrás en el tema.
-Me podes decir tres elementos que no sean gases?- pidió ella viéndome con atención.
Sonreí como imbécil al ver que me seguía tratando de vos.
-Eh… si, si claro- conteste sentándome erguido en la silla y aclarando mi garganta- Oro, Plata y Paladio.
-Gracias- dijo ella mientras se daba la vuelta y escribia la abreviatura química.
Después de la explicación, unos ejemplos y algunos ejercicios la clase termino siendo anunciada la salida por el estruendoso timbre. Todos se pusieron de pie inmediatamente mientras Angie dictaba la tarea que habría para el jueves. Como todo alumno normal Olga y Ramallo se apretujaban entre todos para salir y yo sin esperar a que alguien me llamaran los imite, intenta hacer mi huida triunfal pues mas que nadie tenia un motivo para desaparecer lo mas rápido posible.
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En mi propia trampa
De TodoGerman Castillo era el típico chico popular por el cual todas las chicas se derriten. Tenía el mundo a sus pies hasta que un día conocio a Angie Carrara, la nueva catedrática de su curso. Ella es la unica que no consiente sus manipulaciones y German...