Capitulo 15

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El día paso más agitado de lo deseado, con todos a tu alrededor cuidando que no tuvieras una recaída y uno que otro chiste insinuante de parte de Angel o una mirada amenazante de parte de Alastor asía el felino, el cual lo ignoraba fácilmente al tener sus pensamientos en otra parte, paso una semana de pequeños encuentros y secciones de besos a escondidas con el felino antes de que este te declarará habiertamente como su pareja asiendote escupir tu bebida, Charlie celebró arrastrando a Vaggie consigo, Angel los felicito con comentarios insinuantes y Alastor simplemente mantuvo su sonrisa, los demás miembros del Hotel se limitaron a un incomodo silencio.

—Idiota.

Murmuraste mientras te girabas en tu asiento y cruzaba los brazos sobre tu pecho, la risa del felino se ollo tras tuyo antes de sentir su aliento chocar contra en hueco entre tu hombro y tu cuello.

—no dejaré que nadie más vuelva a tocarte.

Aquellas palabras te habían gustado más de lo que querías admitir, todo parecía ir perfecto, aquel acosador te había dejado en paz después de mostrarle pruebas, tenía una relación con aquel felino amargado que lograba robarte suspiros, y no solo de amor y parecía que sus besos eran sufisiente para saciar tu hambre, todo era perfecto ¿que podría arruinar tan perfecta vida?

—Vaya, parece que nuestra querida zorra está saliendo con alguien.

El sonido de la televisión te sacó de tus pensamientos, eran aquel par de reporteros que humillaron a Charlie, una foto tuya aparecía de fondo por lo qie todos prestaban atención.

—Asi es, más sorprende más que sea nada más ni nada menos que el amargado del inframundo.

Ahora una foto del felino aparecía, lo miraste confundida mientras este te regresaba la mirada de igual manera, no tardó en que apareciera un video de ambos en uno de sus encuentros de besos, reconosiste el video, esa era la prueba que le habías mandado.

—Se ve que se aman.

—Oh mas bien, que el la ama, tenemos una fuente anónima que nos dio el video —tus puños se cerraron con ira —nos a dicho que no fue más que una simple apuesta por parte de nuestra zorra favorita, pobre chico, a de estar devastado.

Un tacon se estrelló contra la pantalla poniendo fin a la transición, todos dirigieron su mirada asía la demonio que respiraba ajitadamente con el seño fruncido. Unos pasos la isieron dirigir su mirada asía el felino que abandonaba la habitación, de manera rápida se puso de pie para seguirlo aguantando su llanto.

—¡Husk! ¡E-espera!

La habitación se quedó en silencio, cada demonio se había sumergido en sus pensamientos evitando que se dieran cuenta de la repentina ausencia del demonio de la radio. Todo había sido demasiado perfecto para ser real, el felino lo sabía e igual de demonio, después de todo, estaban en el infierno.

Súcubo...? //Husk x Reader//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora