Súcubo...? //Husk x Reader//

Capitulo 11

El trabajo en el hotel había aumentado, no importaba cuantos habían sido corridos, siempre llegaban mas huéspedes por la misma razón, logrando molestar a 2 demonios en espesifico, por otro lado, la demonio con características de zorro se veía diferente, el brillo en sus ojos era cada ves mas opaco logrando preocupar a mas de uno.

—Querida, pensé que habías dicho que esto duraría 5 meses.

Ablo su arácnido amigo, se encontraban en la habitación de la de menor altura, esta se ponía maquillaje intentando ocultar sus ojeras, mas al pasar las semanas se volvía cada ves mas difícil.

—Se suponía Angel, pero aunque no tuvo sexo no puedo confirmar que satisfacía sus necesidades de otra forma.

Suspiro rendira ante aquellos intentos por ocultar sus ojeras, cada ves el hambre era mas intensa, podía calcular que le quedaba un mes antes de perder el control y otro para finalmente morir por la falta de alimento.

—Solo tengo 2 meses, si no lo logro en ese tiempo...

—¿Si no lo logras... Que?

La chica pasó saliva y el pánico se iso presente en sus ojos dándole a enter al arácnido de lo que ablaba, este se levantó y rápidamente la abrazo por la espalda.

—No me digas que...

—Asi es Angel, podría morir.

Sonaba ilógico siendo que ya estaba muerta, pero era su realidad, si no moría en alguna purga lo aria por su extraña hambre, el arácnido la seguía abrazando en un inútil intento de que eso jamás pasara.

En otra parte del hotel, un felino veía impasientemente al pasillo que lleveba a las habitaciones, asía días notaba a aquella chica con características de zorro extraña, sus ojos eran opacos y su sonrisa se notaba forzada, aparte de que se veía bastante distraída. Varias veces intento preguntarle, pero evitaba el tema con alguna tonteria.

Un extraño sentimiento de inquietud cresia en el al verla de aquella manera, tal vez la consideraba una buena amiga.

—Agh, le estoy dando demaciadas vueltas...

Murmuro entre dientes mientras tomaba de su botella de licor barato, en cuanto la bajó vio a la chica caminar por el pasillo junto al arácnido, platicaban animadamente, pero como siempre, la chica de notaba cansada.

—¡Husky!

Se acercó a el corriendo y con una sonrisa real, se sintió feliz ante el apodo y la emoción que le causaba a aquella demonio, mas su orgullo se negaba a aceptarlo.

—Ya te e dicho que no me llames así.

—Y ya te e dicho que no dejare de hacerlo.

Su voz se oía sin emoción y unas leves ojeras se encontraban en sus ojos, a pesar de eso, le sonreía de una manera sincera, su sonrisa no se notaba tan forzada como con los demás.

—¿As estado saliendo a fiestas?

—¿Qué? Me ofendes, quiero redimirme y aunque la tentación es grande, no puenso fallarle a Charlie... Eh estado libre de alcohol, drogas y sexo los últimos meses.

—Te notas cansada.

—Bueno, no eh consumido mi droga, sabes lo que pasa cuando alguien intenta dejar su vicio de golpe.

Río levemente, era cierto, pero a diferencia de lo que el felino pensaba, su droga no era como cualquier otra y a diferencia de los demás, esta realmente la podía matar al dejarla por mucho tiempo.