Súcubo...? //Husk x Reader//

Capitulo 9

—Oh cariño, realmente debiste pasarlo mal.

—Bueno, tarde en acostumbrarme, pero ahora es bastante normal.

—Hum, ¿y como te diste cuenta de que necesitabas eso?

—Pues... Tarde unos meses y casi muero, denuevo jajajaja.

—¡¿Como no te diste cuenta antes?!

—De echo, yo no me di cuenta, fue un antigüo amigo. Cuando llegue me tope con un demonio, el cual me dio algunos consejos y se fue, más lo seguí, poco a poco nos isimos amigos, un día lo comvensi de tener una cita y me desmalle, fue cuando se dio cuenta y me lo dijo.

—Entonces tu primera ves fue con el, cierto?

—Si, fue muy atento y cuidadoso, después de eso dijo que tenía que irme y lo entendí.

—¿Y cuando lo volviste a hacer?

—A los meses, cuando me dio hambre. Descubrí que mientras menos actividad sexual tenga un demonio más energía genera, la cual puedo consumir, de echo cuando entre al hotel fui a verle para que me isiera el favor de volver a llenarme de energía, esta dudará alrededor de unos 5 meses creo.

—Vaya que es complicada tu condición.

—Nada que no pueda controlar.

Siguieron platicando mientras tomaban sus bebidas, tras unos minutos desidieron retirarse del lugar y caminar al hotel entre plática y risas.

—No se para que quiere la princesa que vayamos al cielo, digo, aquí disfrutamos y allá viviremos finjiendo ser unos santos.

—Eh, cariño ¿hace cuanto que no tomas?

Después de la primeras bebidas habían pedido mas, pero no tantas como para embriagarse o eso pensó el arácnido.

—Etto... No lo recuerdo.

Río dejándose llevar por los efectos del alcohol, solía beber seguido, pero no hasta el punto de embriagarse.

—Angel~ llévame con el gatito, debo agradecerle por la ropa~

—Ya abra otro momento para eso ____.

—Bu~ quiero acabar esto antes de terminar enamorandome.

Iso un puchero dejando más peso en su amigo, este la miró con curiosidad ante lo antes dicho, ¿enamorada?

—¿De qué ablas linda?

—E amor es malo, Angel, nunca te enamores~ pero el gatito no me a tratado como los demás, no quiero enamorarme. Solo me acostarse con el y ya~

Río mientras se soltaba y tambalea a, el arácnido la tomó con sus otras manos de la cintura para que no cayera, después de un rato finalmente llegaron al hotel, el arácnido la llevó directo a su habitación para evitar que los demás la viera de esa forma.

—Mañana despertará con un orrible dolor de cabeza.

—Tu tomaste más, ¿por qué no estás ebrio?

—Por qué yo ya estoy acostumbrado.

La dejó en la cama y ayudó a quitarle el calzado para que pudiera dormir, cuando se aseguró de que se había quedado dormida salió de la habitación sin hacer mucho ruido.