Los Tratos No Siempre Son Justos.

1.9K 118 17
                                    

PROV KATNISS.

Hoy es vienes, lo cual quiere decir que ya han pasado 4 días desde que el presidente Snow vino a ofrecerme trabajo, 4 días desde que días desde que tengo dinero, 4 días desde que como bien y lo mejor de todo 4 días desde que Prim está libre de la cosecha.

Estoy en mi casa sentada en la orilla de la cama pensando en que es lo que sucederá ahora ya que, no tengo que ir a la escuela, ya que después de aceptar el trabajo, al día siguiente que fui me dieron la noticia que ya no tengo que asistir a ella porque gracias a que tengo un trabajo ya no tengo la necesidad de ir ya que aprender todo sobre la minería del distrito no me ayudara de nada, aunque tampoco me hubiera servido de todos modos.

Estos días los he estado aprovechando  para aumentar de peso y hacer ejercicio para lograr mi peso cosa que si se notó de un día para otro ya que antes se me notaban hasta las costillas y ahora ya tengo un poco más de figura.

Veo el pequeño reloj y veo que ya es la hora de salida en la escuela, por lo que me coloco mis botas y la cazadora de mi padre ya que quede con Peeta para verlo en la pradera y poder explicarle el porqué de todo esto.

Cuando llego a la pradera él aun no llega, por lo que decido sentarme y dirigir mi vista al bosque, deseando con toda mi alma volver adentrarme en él ya que cuando estaba en el bosque era yo misma, Katniss Everdeen, aquella chica a la que le gusta ir al bosque, trepar en los árboles, nadar en el lago y cantar, ya que siempre cuando iba sola llegaba al lago que me mostro mi padre hace varios años atrás y me metía a nadar y mientras me secaba me ponía a cantarle a los Sinsajos, como extraño esos tiempos, en los que no tenía que preocuparme por llevar comida suficiente a la mesa para que Prim no tuviera que pedir teselas, ya que no cumplía con la edad requerida.

Sigo perdida en mis pensamientos cuando siento que apoyan una mano en mi hombro izquierdo, volteo para ver de quien se trata y me percato de que es Peeta, me está sonriendo por lo que yo le correspondo con una sonrisa tímida, se sienta a un lado de mí y mira también al bosque igual que yo.

-¿Cómo es estar en el bosque?- pregunta después de un par de minutos, no me sorprende que pregunte eso ya que como es de la zona comercial él nunca ha ido al bosque y de hecho somos contadas las personas que nos atrevemos a ir.

-Pues no sé cómo explicártelo, así que solamente voy a decir que te sientes libre- digo sinceramente.

-Libre- dice para sí mismo como entendiendo porque dije eso.

-Si libre, libre de responsabilidades, libre de la tristeza que se siente en el distrito y libre de hacer lo que quieras- digo sonriendo mientras recuerdo lo feliz que era estar allí.

-Debes de estar muy triste por no poder entrar- no es pregunta, pero aun así respondo.

-Sí, pero todo ocurre por algo- veo de reojo como voltea a verme y sé que me va a preguntar de donde saque el dinero, por lo que me adelanto. - ¿Te preguntas de donde saque el dinero de un día para otro, verdad?- digo volteando a verlo para quedar frente a frente.

-De hecho te lo he querido preguntar desde que fuiste a la panadería aquel día- Responde serio.

Find You. (Encontrarte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora