▪︎ ❝el hilo rojo puede enredarse, estirarse, tensarse o desgastarse...pero jamás romperse.❞
Después de cinco años, las vidas de Ana Lane y Chris Evans vuelven a unirse. El tiempo no ha pasado en vano, sus vidas son diferentes a lo que recuerdan, per...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
ANA SE CARCAJEA FELIZ y la pequeña Sofia acerca sus manitas a su rostro, adorando nuevamente la gracia que su madrina hace, escuchándose la risita tan angelical de la pequeña enseguida.
—¿Qué tal?— pregunta Gwen deteniéndose en medio de la habitación capturando la atención de la mujer y obteniendo unos balbuceos alegres de su pequeña. —Me veo despampanante, ¿no?— dice y Ana asiente con una efervescencia única.
Para la fiesta de esa noche su amiga había escogido disfrazarse de la villana de Disney Maléfica, obviamente un poco más sexy de lo que se le puede recordar al mítico personaje y sin duda, lucia impresionante.
—¡Luces espectacular!— dice Ana, mientras levanta a Sofia en sus brazos y la deja descansar después sobre sus muslos. La pequeña sujeta sus manitas a los dedos de la mujer, teniendo su regordete rostro en dirección a su madre. —Y al parecer, a Boo le gusta mucho, también.
—¡Claro que sí!— alardea Gwen, estirando enseguida sus brazos hasta su pequeña, quien más que feliz se deja cargar. —Tiene el mismo buen gusto de su madre, ¿no es así, amor mío?— y ambas se derriten ante la aparente adorable respuesta que la bebé da.
—¿Dónde está tu disfraz?
—En la otra habitación...
—¿De que van esta noche? Lo he olvidado...
—Yo de Megara y Jackson de Hércules.— comenta nuevamente y Gwen le observa con cierta duda.
—Ustedes dos y su fascinación por la mitología me volverá loca.— susurra. —¿Quién es Megara, de todos modos?— y la indignación en el rostro de su amiga no tiene precio.
—¿No has visto Hércules? Debería darte vergüenza.
—Ya sabes que Disney y yo no congeniamos muy bien.
—Pobre de Boo. Que suerte que me tiene como su madrina.
Ambas amigas comparten una ligera risita antes de que Ana vuelva a hablar.
—Megara fue la primera mujer de Hércules. Después, él la mató pensando que era Hera.— guarda silencio y el rostro de Gwen muestra una preocupación que a Ana le resulta bastante divertida.
—Okay, ve y alístate, por favor...— le ordena y Ana hace caso inmediatamente.
No le toma más de una hora el estar lista y cuando sale del baño, encuentra solo a su amiga, quien le indica que Sofia ya estaba en camino a casa de sus abuelos.
