𝐀𝐋𝐖𝐀𝐘𝐒 𝐀𝐍𝐃 𝐅𝐎𝐑𝐄𝐕𝐄𝐑 | DONDE dos almas se reencuentran después de décadas.
Ella no cree en el destino.
Él cree en el cada vez que la mira a los ojos.
Ella solo ha estado en una relación, pero sus libros la han hecho vivir miles.
Él n...
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DAV.
— Tienes que esforzarte más.
— ¡Lo intento!
Estire la mano como si eso fuera ayudarme a que la esfera de agua siguiera levitando en el aire, pero esta cayó.
Apenas ayer me habían reconocido y supe quién era mi padre y que Percy es mi hermano. Él se lo tomó de maravilla tanto que a lo que dejo de abrazarme decidió que hoy sería el día de "tiempo de calidad hermano mayor y hermanita." – Literalmente así lo llamó. – para crear un vínculo o lo que sea.
Y ahora me encuentro frente al lago peleando con una esfera de agua solo porque no puedo mantenerla en el aire por mucho tiempo.
Que bajo he caído.
No te hagas, admite que te gusta esto.
Solo porque accidentalmente mojé a Valdez.
Bueno, también por eso y...
¡Bien! También porque Percy no es tan molesto.
Lo quieres.
Cállate, no puedo encariñarme, recuerda que cuando el verano termine no pienso volver.
Ya veremos.
Genial ahora también peleo con mi conciencia.
Aunque muy en el fondo sé que tiene razón, Percy era agradable, imposible no llegar a tomarle cariño.
De vuelta a lo que hacía.
— Bien hecho, – Felicitó Percy. – has durado más tiempo que la última vez.
— Soy un asco.
— ¡Claro que no! Solo necesitas práctica. – Extendió su mano. – Ven, hora de probar otra cosa.
— Por qué será que tengo un mal presentimiento. – Dije tomando su mano.
— Es muy fácil, confía en mí. – Dijo mientras sonreía.
Sin que yo lo esperara, Percy convirtió su bolígrafo en Cortacorriente y me hizo un corte en la mano.
— ¡Auch! – Zafé mi mano de su agarre y la acuné contra mi pecho. – ¡¿Qué te pasa?!
No me sorprendí al ver que mi herida empezó a sangrar.
— Nosotros podemos curarnos con el agua. Inténtalo.
Avancé desconfiada al lago y me agaché metiendo mi mano. Poco a poco vi como la herida desaparecía hasta quedar una cicatriz y después nada.
— Bien... Ahora haremos algo más. – Volvió a tenderme la mano. – ¿Confías en mí?
