CAPITULO 11 "EN LA MIRA"

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Negro y azul, te lo ruego...

Habían pasado dos días de mi respuesta, por lo cual ninguna de las dos nos hablábamos en el instituto, pues Allison se ve muy ocupada con sus entrenamientos de porrista. Alejandra la cual me causaba gracia, pues admiraba y odiaba a Morgan a su misma vez, la necesidad de ser correspondida, pero temía ser rechazada, así que me propuso ir a las gradas para observar el entrenamiento de ellas.

Acepte y Isaac nos hizo compañía, a él tambien le gustaba observar a las porristas, pues según él, después de todo es bisexual y las chicas le agradan. Yo solo observaba a Allison, sus movimientos y gestos de cansancio y más porque el sol le lastimaba su mirada, nos descubrió y me sonrió, pero no solo ella se dio cuenta; al parecer Lauren tambien me sonrió.

Ambas me saludaron de lejos, con su brazo y yo imite su acción. Duramos todo el tiempo de la rutina, hasta que Lauren se acercó junto con su hermana y Morgan. Me causo gracia que Alejandra se tensara al ver tan de cerca a su amor imposible.

-¿Qué les pareció la rutina? -Lauren nos preguntó y los tres alzamos pulgares. -Lo sé, es excelente.

Allison se veía molesta desde la distancia, pero Abigail estaba con ella y no sé exactamente sobre que hablaban. Pero de lo que estoy segura, es que al ver a William abrazarla por la cintura me ocasiono una sensación extraña, un dolor de estómago, como si sintiera coraje.

Lentamente fuimos bajando de las gradas para irnos a nuestra última clase, la cual era historia y me aburria, porque el profesor solo nos ordenaba leer y hacer un ensayo de cada capítulo. De vez en cuando, observaba a Allison, la cual se encontraba muy concentrada.

Al finalizar las clases, salí del aula en compañía de Isaac. Me dijo que lo esperara sentada en una mesa de cafetería, pues quería ir hablar un momento con el chico de la fiesta, pero que quería irse conmigo a la salida. Así que saqué un libro de la mochila y comencé a leer, pero sentí unas manos frías en mis ojos.

-¿Allison?

-Mierda, ¿Cómo supiste? -dijo frustrada y se sentó en frente de mí. -Quería hacerte sufrir para que adivinaras.

-Usas loción de fresa, así que es difícil engañarme. -Ella no hablo, pero solo me observaba sonriente.

Después de un rato se atrevió a tomarme la mano, con demasiado sonrojo, entrelazo mi mano con la suya. -¿Ya tienes pareja para el trabajo de química? -sentía como sudaban sus manos, mientras jugaba con la mía.

-No, aun no. -Contesté con una sonrisa, sabía que esa noticia la había puesto contenta.

-Entonces, ¿Hacemos el trabajo juntas?

-Está bien. -Ella colapso de la emoción y le dio un leve apretón a mi mano, podía sentir todos sus sentimientos con tan solo un rocé.

Isaac había llegado y nos contó cómo le había ido con el chico, nosotras íbamos caminando con nuestros brazos entrelazados, nadie puede pensar que este gesto es intimo entre mujeres y por eso caminábamos sin preocupación. Allison se encargó de darle la noticia a Isaac, le dijo que yo haría el trabajo con ella, por lo que buscara otra pareja.

Sophia llego por nosotras y Liam, dijo que llegando a casa serviría la comida y podíamos estudiar después, pues quería saber cómo nos había ido en todo el día. Al terminar de comer subimos a mi habitación, para hacer el trabajo, así que saque mi cuaderno y comenzamos a investigar, ambas nos encontrábamos sentadas en el suelo. Confieso que no podía concentrarme con precisión, porque me gusta observar cómo Allison se sonrojaba cada vez que nuestras miradas se cruzaban, me sentía torpe, porque a mí no me puede estar pasando estas cosas tan cursis.

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