Soy una rosa rota (Porco x Reiner)

Capitulo 33

     Meses. Muchas cosas pasaron en algunos meses. Afortunadamente la mayoría fueron buenas. 
     El día de playa fue realmente bueno y divertido. La mañana de ese día no queríamos levantarnos, Reiner y yo tuvimos una noche… activa… divertida… ¡El maldito me hizo gemir y me molesto con que me escuchaba lindo! Por suerte el maldito solo me molesto en la mañana y no volvió a mencionarlo. 

     ─Porco… Porco… ¡Porco! ─Reiner susurra con fuerza.

     Estamos acostados en su cama, envueltos en sus sábanas y casi desnudos ya que solo estábamos usando nuestra ropa interior. 
     Mantuve los ojos cerrados e hice un leve sonido para que supiera que si estaba escuchando, estaba muy cómodo, solo quería dormir más. 

     ─Son las seis de la mañana, tenemos que estar listos para salir a las siete. 

     ─Shh, callate, cinco minutos más.

     ─Oh, vamos, ya hay que levantarnos… Bien ─dijo antes de rendirse y de colocarse en otra posición cómoda, quiere lo mismo que yo.  

     La habitación se quedó en silencio por un momento, solo podía escuchar la tranquila respiración de Reiner a unos centímetros de mi. Estaba a punto de quedarme dormido cuando volvió a hablar. 

     ─Oye Porco. 

     ─¿queee? ─arrastre la palabra por el sueño. 

     ─¿Les diremos a todos hoy? 

     En esta ocasión puse más atención en lo que decía y abrí los ojos ligeramente. 

     ─Solo si tu quieres, podemos esperar más tiempo  ─dije tratando de sonar lo más claro posible. 

     ─No lo digo por mí, yo estoy listo, los conozco muy bien a todos ellos, lo digo por ti… ─espero un segundo, como si no quisiera decirlo─ por lo que paso con tus otros amigos, por lo que hicieron ¿no tienes miedo? 

     Lo pensé por unos segundos, bastantes, Reiner incluso creyó que me había quedado dormido. Varios recuerdos muy dolorosos pasan por mi mente. Yo en el piso siendo pateado por los imbéciles de la otra escuela. A los que llame amigos diciendo que solo fue una broma. Zeke dándome la espalda y alejándose. 
     Reiner al ver que no respondía, asumió que me quede dormido. Iba a acomodarse para dormir más tiempo cuando finalmente dije. 

     ─Nuestros amigos son muy distintos a aquellos bastardos. Y lo más importante, tú eres totalmente distinto a Zeke, jamás me abandonarías de esa manera ¿cierto? 

     ─Nunca lo haría. 

     Eso fue más que suficiente. 
     Estaba casi despierto en su totalidad y estaba de muy buen humor. Así que dije la primera tontería que pasó por mi mente. 

     ─Jamás me abandonarías, eh. Veamos ¿me rescatarías si un vagabundo sin pierna ni ojo me usara como cascanueces para comerse a una sirvienta que tiene un martillo gigante? 

     ─¿¿Qué mierda?? 

     ─¿Eh? nada, solo un sueño. Vamos, ya hay que levantarnos o llegaremos tarde. 

     ─Bien, voy a encender la lámpara. 

     Tantas cosas que pasaron en algunos meses y todo comenzó a partir de ese día. 
     Ese día le dijimos a todos nuestros amigos que eramos pareja. La gran mayoría sabía que ya había algo entre nosotros. En especial después de que les pedí a muchos de ellos que me ayudaran con la canción.  Pero entre esas personas no se encontraban Eren, Sasha y Connie. Eren por lo fácil que se enoja con Reiner en los videojuegos. Al principio pensé en decirle, pero Mikasa me recomendó que mejor no lo hiciera. 
     Con Sasha y Connie fue muy claro desde el comienzo. Hablan y hablan. Si se los hubiera dicho se les habría escapado en un momento o otro. No intencionalmente, claro.
     Los tres parecieron ofendidos cuando les dije la causa. Se les pasó a los pocos minutos cuando se dieron cuenta de que tenía razón. 
     Nos fuimos al anochecer, es claro que no nos perderíamos la puesta del sol. Mucho menos Eren, quien se levantó de repente y comenzó a apuntar hacia el horizonte.