Saludo de un abrazo con bastante alegría a su amigo, al fin habían llegado al dichoso lugar. Era un restaurante al que habían visitado desde que eran adolescentes y por supuesto clientes frecuentes en ese entonces, pese al tiempo los dueños del lugar los seguían reconociendo desde hace mucho
Tomando asiento junto a el más alto y frente a su otro amigo decidieron ordenar primero.
— ¿Que les ofrezco?
— Estamos bien con lo de siempre, gracias
Después de que la chica se hubiera alejado, los tres volvieron a verse y comenzaron una conversación amena. Hablando sobre como les había estado llendo, el trabajo, varias cosas triviales y de más.
Así no paso mucho cuando por fin ya tenían cada uno su orden y comían felizmente de ella.
— De todos, creí que mínimo Ken que sería papá primero, no Pah
— ¡Hey! Eso es una ofensa
Solto una risa estando de acuerdo con Kazutora y dio un bocado a su comida; cuando se habían conocido Ken y él se volvieron bastantes cercanos por lo que Kazutora les confesó que cuando los había visto por primera vez parecían una pareja. Ellos rieron por eso
. . .
— Y bien, ¿Qué es lo importante que ibas a decirnos?
Giro su rostro con clara confusión reflejada hacia sus amigos y enseguida notó como el rostro del de mechas se pintaba de un rojo carmesí, de su costado saco rápido una pequeña cajita decorada y la puso frente a Ken y él
— Un minuto- ¿Qué cosa importante?, ¿Por que no me dijeron nada?
— ¿Tora no te lo dijo?
— No
Dejo de un lado su postre y se acomodo mejor en su asiento para ver la cajita en sus manos. No estaba pesada, era bastante ligera y parecía no a ver nada, seguramente una de las tantas bromas de Hanemiya
— Antes de que lo abrán deben prométeme algo, ¿Vale?
— Mientras no involucré dinero esta todo bien
— Puedo pedirle eso a Koko —Kazutora bufó un poco y cruzo sus brazos viéndoles al parecer impaciente, era un momento extrañó
Poso de nuevo la caja frente suyo y por fin se decidió a hablar— Bien, ¿Qué es?
— Deben guardar el secreto, no quiero que Pah se entere por alguien más
Entré miradas de curiosidad entre Ken y él al final terminaron aceptando, no tomo mucho cuando de la misma bolsa de hace un momento Kazutora sacó de ahí un paquetito de confeti.
¿Qué era eso?, ¿Una fiesta?
— Bien, a la cuenta de tres abren el regalo. Una...dos... —las manos de su amigo temblaban y apenas lo noto, estaba más emocionado que ellos mismos y no entendía— ¡Tres!
Su mano como la de Ken tomaron el papel y lo rompieron sin cuidado, eso a Kazutora fue lo que menos le importo en ese instante, si no la reacción que tenían en su rostro cuando abrieron la caja.
De la mano de Ken colgaba un pequeño zapatito y Mitsuya sostenía una prueba, todo carburo en un segundo y él solo atino a aventarles un puño de confeti
— ¡Felicidades! Van a ser tíos
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