La mañana paso relativamente normal. Mitsuya y Mikey olvidaron la noche anterior e hicieron lo mismo de cada mañana, desayunaron juntos y Manjiro se ofreció a llevarlo al trabajo.
Ahora se encontraba ahí, en la silla de su escritorio mordiendo uno de sus lápices mientras veía atentó la información de internet sobre la página web que seguía. Eran novelas románticas, y sí, las leía por la trama. Kei se había burlado cuando se enteró que él leía ese tipo de historias, incluso Kazutora, no los juzgaba
Pérdido entre cada párrafo de la novela no pudo escuchar cuando estaba la puerta estaba siendo tocada de forma insistente. Estaba absorto en su imaginación, cada beso y caricia que Erick daba a Demian lo estaba sintiendo incluso él, hasta que llegó el tormento de su trabajo
— ¡Mitsuya!
Pegando un salto y aventando sin querer por la sorpresa su celular, fue a dar un grito contra la oreja de su mejor amiga— ¡Akane! Maldición, ¿P-por que no tocas la puerta?
— ¿Ah? Pero si te toqué varias veces, tu y tus historias de amor, te lo digo enserio. Busca a alguien Takashi-kun
Sonrojandose por desvergonzado comentario solo pudo atinar a alzar su celular nerviosamente y dejarlo sobre el mismo escritorio de madera para después caminar hasta el otro extremo de su taller
— A-aquí esta, ¿Es por lo que venías, no?
Hizo aún lado la cortina vino y detrás de la misma se asomó un vestido blanco corte princesa, los detalles que destacaban eran las figuras en la parte superior del mismo y las pequeñas perlas. Entonces fue imposible para Akane abrir la boca sorprendida, corrio hasta tocar la fina tela delicadamente; era tan lindo, dios le gustaba tanto.
— ¡Takashi-kun, esta vez te has lúcido! Me encanta
Orgulloso de provocar el brillo en los ojos de su amiga no pudo evitar sentirse aún más feliz de su trabajo, habían pasado ya casi tres meses desde que ambas chicas y pareja, le habían pedido el honor de ser él mismo el diseñador de sus trajes de ese día.
— Quiero ver como te queda, por si hacen falta retoques
. . .
— Muchas gracias de nuevo Mitsuya
— No es nada Inupi, lo hago con gustó, aparte Akane se ve muy bien en él.
— Me halagas Takashi-kun, Emma-chan vendrá pasado mañana igual a probarse su traje. ¡Se bueno con ella! —dando ambos hermanos una reverencia los vio salir de su taller con una gran sonrisa y en sus manos llevando ahora el vestido.
Bien, otros dos trabajo menos contando el Emma.
Tomo asiento de nuevo en su silla, en sus manos tomo su celular y lo prendió para volver a retomar su lectura, grande fue su sorpresa al notar que el celular no encendía. Golpeó, quitó y trato de todo para recuperar a su teléfono, pero en definitiva no prendía
Genial, ahora ocuparía el dinero que acababa de ganar para comprase otro nuevo celular o en definitiva iba a perderse de esas grandes escenas románticas entre Erick y Demian
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