Capítulo 8

345 35 0
                                    

El plan era simple.

Thomas iría de carnada y atraería a la perra de Teresa a el lugar en el que estaríamos Gally y yo aguardando por ellos. 

Los ánimos se encontraban por el suelo, Newt decidió por si mismo mantenerse al margen de este plan por "precaución" según él. Yo por mi parte me había ofrecido a ir, solo para poder mantener mi mente distraída en algo que no fuera el remolino de sentimientos que se alojaba en mi cuerpo.

Por lo que aquí nos encontrábamos, aguardando a la llegada de Thomas y Teresa, ocultos tras unas columnas, ocultando nuestro rostro con las capuchas de nuestros abrigos.

— Y, ¿Cómo estás?— intentó sacar un tema de conversación.

—Gally, no quiero que me tomes a mal, pero por el momento no quiero hablar, vine aquí para no pensar en nada más que en este estúpido plan de secuestrar a la maldita traidora y asesina de Teresa para que nos ayude a ingresar al edificio de CRUEL, recuperar a Minho y poder conseguir una cura para el idiota cabeza dura de mi novio— hablé rápidamente.

Gally se quedó mirándome por unos segundos antes de asentir y dejar de lado cualquier intento de conversación.

—Ya veo como estás— murmuró, ganándose una mirada fulminante de mi parte.

 Pasados unos minutos comenzaron a escucharse pasos acercándose, seguido de voces.

Thomas se encontraba allí, a unos metros de nosotros, y frente a él estaba una de mis personas menos preferidas en este mundo.

Teresa.

Llevaba un largo tapado, una remera de color celeste, jeans claramente nuevos, un bolso y unos tacones en sus pies.

Así es, mientras que Brenda y yo nos vestíamos con lo que encontrábamos, ella se encontraba en el mejor estado posible.

—No deberías estar aquí— susurró ella— Si Janson se entera de que estás aquí—.

—No me voy a quedar— respondió él de la misma manera, dando un par de pasos hacia ella— Solo tenía que verte, tengo que preguntarte algo— la miró directo a los ojos— ¿Te arrepientes de lo que nos hiciste?, ¿de haber intentado matar a Rose y de acabar con la vida de Chuck?—.

Tanto Thomas como yo nos quedamos a la espera de la respuesta de ella, queriendo saber si en algún momento dentro de estos meses sintió remordimiento, si recordaba el rostro de Chuck y sentía un poco de culpa por haberlo asesinado.

—A veces Thomas— dijo al fin— Pero hice lo que creí correcto—.

A veces.

Ella se sentía culpable, a veces.

Ella tal vez sentía culpa durante unos pocos minutos al día, mientras que nosotros estuvimos meses intentando salvar a Minho, mientras que Newt incluso se infectó en el proceso de venir hasta aquí, mientras que yo no fui capaz de cerrar los ojos sin que se viniera a mi mente el rostro pálido de Chuck y la sangre saliendo de su boca mientras que un cuchillo se encontraba incrustado en su pecho.

Ella sin embargo solo era capaz de sentir culpa a veces.

—Dime que puedo golpearla— le susurré a Gally.

—Puedes pretender que lo hiciste sin darte cuenta en el trayecto de aquí hacia la guarida— me recomendó él con odio en su voz.

—Con eso me basta por ahora—.

Continuamos escuchando lo que decían.

—Lo haría de nuevo de ser necesario—.

Al escuchar eso mi respiración se cortó de inmediato, sería capaz de hacer todo otra vez. Teresa, quien alguna vez fue mi amiga, haría todo de nuevo, nos mentiría, se aliaría con CRUEL, intentaría matarme e incluso asesinaría al pequeño Chuck una segunda vez, con tal de hacer lo que ella cree correcto.

Thomas la miró por unos instantes y luego nos hizo una seña casi imperceptible.

—Okey—.

Sin más nos acercamos a ella por detrás y Gally le colocó una bolsa en la cabeza, imposibilitándole la capacidad de ver hacia donde nos dirigíamos, mientras que yo tomaba su brazo con más fuerza de la que era necesaria.

. . .

Hasta que llegamos junto a los demás Teresa se "tropezó" cinco veces, solo por que accidentalmente se me olvidaba avisarle donde debería pisar.

Diría que lo siento, pero la verdad es que al igual que ella, lo haría otra vez.

Ahora ella se encuentra sentada en una silla, con todos nosotros rodeándola y dirigiéndoles miradas pocos amistosas.

Es decir, es Teresa.

Cuando Gally le retiró la bolsa de la cabeza, debo admitir que su expresión vale oro; se quedó observándolo sin comprender mucho como es que él está allí.

—Gally—.

—Esto es lo que va a suceder— habló el recién mencionado, sacándome una pequeña sonrisa debido al tono de chico malo que utilizó— Te haremos unas preguntas y tú nos dirás lo que necesitamos saber— se puso de pie— Empezaré con algo simple, ¿Dónde está Minho?—.

El ex constructor tomó una silla y la colocó frente Tersa, para luego sentarse y observarla fijamente a la espera de una respuesta.

—No creerán que enserio les. . .— intentó hablar, pero nuevamente Gally la interrumpió.

—No lo mires a él— dijo al notar que la mirada de ella rápidamente había ido hacia Thomas—¿Por qué ves a Thomas?— se señaló— A mi, él no va a ayudarte—.

Ella intentó nuevamente mirar al ex corredor, pero este rápidamente evitó su mirada.

—Sabemos que Minho está en el edificio, ¿Donde?—.

—Está con los demás— habló finalmente— Confinado, subnivel tres—.

—Eso fue fácil— murmuré, ganándome una mirada de reojo de su parte. Sin embargo, al notar esto, Newt habló.

—¿Y cuantos son?—.

Teresa apartó su mirada de mi.

—28—.

Al escuchar eso Gally se giró hacia Brenda, quien se encontraba jugando con unas cartas.

—Creo que puedo con eso— dijo confiada, observando a Jorge, quien asintió.

Al instante la voz de Teresa se escuchó nuevamente.

—No, no lo entienden, todo el nivel está restringido, y necesitan validar con huella digital—.

—Por eso vendrás con nosotros—  habló Thomas.

—Pues no lo sé— interfirió Gally— Yo digo que no es necesario— se puso de pie— ¿Verdad?, no completa, solo su dedo—.

Escucharlo decir eso último con tanta seriedad mientras tomaba un pequeño bisturí causó que yo rodara los ojos desde mi lugar y que también me pusiera de pie.

—Gally ya estuvo bien, relájate— lo regañé.

—Te garantizo que ella ha sido peor con Minho— recalcó.

—Si, lo sé, pero nosotros no somos como ella— me acerqué a él y le saqué el bisturí— Por suerte no lo somos— dije observándola seriamente. 

—Si quieren lastímenme—.

—No me tientes Teresa— le advertí.

—Ni aún así van a poder entrar, el sensor detectará a los que. . .—.

—Tenemos marca— la interrumpió Thomas colocándose de cuclillas junto a ella— Propiedad de CRUEL, también nos ayudarás con eso— me tendió la mano, para que le diera el bisturí que le había sacado a Gally.

—Te aseguro que negarte no es una opción— aclaré regresando a mi lugar, después de todo, yo no tenía la marca de CRUEL desde que me habían devuelto los recuerdos— Y si intentas algo, disfrutaré mucho dejando que Gally se quede con uno de tus dedos para comprobar su hipótesis—.

Más allá de la Cura. The Maze Runner #3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora