Más allá de la Cura. The Maze Runner #3

Capítulo 5

-¿Cómo es que siempre nos terminan atrapando?- susurré indignada mientras observaba a los tipos que teníamos sentados frente a nosotros.

Me encontraba sentada en el suelo de la camioneta, entre Brenda y Thomas, quienes estaban atentos a cualquier movimiento que hicieran nuestros captores, quienes por cierto, solo nos observaban.

-¿Y ustedes que miran?- les cuestioné ya que me comenzaba a sentir incómoda.

-Rose, cálmate- me habló Brenda.

-¿Sabes quien no debe estar calmado?- la observé- Jorge-.

Ella solo asintió dándome la razón, ya que todos sabíamos que cuando se trataba de Brenda, el hombre no se quedaría de brazos cruzados ni dejaría que le hicieran el más mínimo de los daños.

Pasado el tiempo nadie dijo ni una palabra, solo nos encontrábamos allí, sintiendo las sacudidas que daba el vehículo debido a la velocidad a la que íbamos y el aparente desinterés y cuidado del conductor al conducir.

Una frenada repentina y un golpe en la parte trasera nos indicó que habíamos llegado a algún lugar. Luego abrieron la puerta y nos gritaron que saliéramos, cosa que Thomas nos ayudó a hacer a Brenda y a mi.

Al bajar vi que Newt y Sartén ya se encontraban allí, por lo que disimuladamente me acerqué a él. Por que, a pesar de estar enfadada nos puedo evitar preocuparme por el rubio idiota que tengo como novio, lo admito.

Un tercer vehículo llegó al lugar, solo que dentro de este se escuchaban sonidos de lucha, la voz de Jorge y algún que otro golpe.

-Yo dije que él no estaría calmado- dije cruzándome de brazos al ver como una puerta se abría y de el interior de la parte trasera de la camioneta salía despedido uno de los tipos con ropa militar- Mierda-.

Todos intentamos acercarnos a él para detenerlo, pero nos detuvieron al instante.

-¡Jorge, Brenda está bien!- gritó Thomas, pero Jorge no lo escuchó.

Mientras Brenda intentaba que la viera, los demás nos alejaron y apuntaron con sus arma, o al menos eso fue lo que hicieron con Newt, Sartén y Thomas, ya que quien me había subido a la camioneta me tomó nuevamente del brazo y se puso frente a mi cuando uno de sus compañeros intentó acercarse.

-Todos cálmense, estamos del mismo lado- habló tratando de calmar a todos una vez que Jorge se detuvo.

A pesar de que Newt intentaba acercarse nuevamente a mi, no le pude prestar atención, debido a que algo en ese chico la había captado antes.

Su voz era extremadamente conocida para mi.

-¡¿Como que del mismo lado?!- preguntó Thomas molesto- ¡¿Ustedes quienes son?!-.

Todo quedó en absoluto silencio, mientras que yo incliné mi cabeza observando a quien estaba a unos pasos de mi y comencé a avanzar hacia él.

-Rose, ¿que haces, regresa aquí- intentó persuadirme Brenda al ver lo que hacia sin siquiera percatarme de ello, ya que me encontraba inmersa en mis pensamientos y tratando de ver más allá de la máscara.

Al estar a unos centímetros de distancia elevé mi mano para tomar esa máscara y retirarla del rostro de aquel chico.

Cuando al fin lo hice, dejé escapar una pequeña exclamación mientras que retrocedía unos pasos, sin ser completamente capaz de comprender lo que sucedía.

-Hola Rose- dijo él sin dejar de observar mi reacción.

-¿Gally?- la voz de Thomas se escuchó a mis espaldas, estaba cargada de confusión, al igual que mi rostro en ese momento.

-Novato- contestó el antiguo constructor.

Sentí como el pelinegro pasaba junto a mi golpeando levemente mi hombro y luego le lanzaba un golpe en el rostro a Gally, quien perdió la estabilidad y cayó de espaldas al suelo con Thomas sobre él.

Llevé ambas manos a mi boca debido a que esa acción por parte de Thomas me había tomado completamente por sorpresa. Los demás se precipitaron a separarlo, ya que al instante los que llevaban armas y nos superaban en número lo apuntaron.

-Oye oye oye, basta- le dijo rápidamente Newt al llegar junto a él- Basta-.

-Le disparó a Rose, casi la mata- gruñó Thomas con su puño preparado.

-Si, lo se- le dio la razón el rubio- yo estuve ahí y por si no lo recuerdas, casi pierdo a la chica que amo ese día- me observó de reojo pero al instante regresó su atención a Thomas- pero a pesar de que yo también quiero golpearlo, recuerdo que lo habían picado y que perdió la cabeza- miró a su alrededor- solo cálmate ¿okey?-.

Thomas lo dudó por un instante antes de separarse de mala manera y ponerse de pie, sin dejar de mirar mal a Gally, quien se puso de pie y tomó su mandíbula.

-Si que lo merecía- se encogió de hombros- ¿Alguien más?, ¿Sartén?, ¿Newt?- dirigió su vista hacia mi- ¿Rose? eres a la que más comprendería si decide . . .-.

No lo dejé terminar, ya que sin que en cuestión de un segundo y sin que nadie pudiera preverlo mis brazos se encontraban alrededor de la cintura de Gally, quien quedó estupefacto por unos segundos antes de corresponder a mi sorpresivo gesto y rodear mis hombros.

-Idiota- murmuré antes de separarme de él y golpear suavemente su hombro con mi puño- Pensé que habías muerto-.

-Yo creí lo mismo de ti niña- dijo apenado.

-¿Cómo es esto posible?- preguntó Newt colocándose junto a mi- Todos te vimos morir-.

-Para ser exacta, ustedes dijeron que lo vieron morir, yo me encontraba ocupada dándome cuenta de que tenía una bala en mi abdomen- especifiqué encogiéndome de hombros.

-En realidad me dejaron para que muriera- habló Gally-Y si no los hubiéramos encontrado estarían muertos todos-.

-Gracias Gal- dije tranquilamente, ganándome la mirada de todos sobre mi- ¿Qué? él nos salvó-.

-Oigan, y ¿que hacen aquí?-.

-Minho- respondió Newt- CRUEL lo tiene allí, buscamos como entrar-.

Gally nos observó detalladamente antes de hablar.

-Yo los puedo ayudar, vengan conmigo-.

Estaba por comenzar a caminar cuando sentí la mano de Thomas rodear mi muñeca, logrando que me detuviera.

-No iré a ningún lado contigo- dijo molesto.

-Como quieras Thomas, pero yo se como entrar ahí-.

Me giré hacia Thomas y tomé la mano que sostenía mi brazo para llamar su atención y lograr así que me mirara.

-Thomas, se que no confías en él por lo que pasó, pero es la única forma de rescatar a Minho, lo hemos intentado por nuestra cuenta y no salió para nada bien, casi nos liquidan- susurré- ¿podrías dejar de lado por el momento el hecho de que Gally casi me mata, de que es un idiota, de que posiblemente aún te odie y confiar en él? - se escuchó la queja del recién nombrado-Luego puedes odiarlo nuevamente y golpearlo cuanto quieras-.

Todos lo miraron expectantes, mientras que él me miraba a mi antes de cerrar los ojos en señal de resignación para luego asentir, causando que una sonrisa de victoria invadiera mi rostro antes de soltar su brazo y alejarme para seguir a Gally.