Por mis ojos. © [SEGUNDA PARTE]

8

Maraton 2/3

Bogdana.
 

Tomas me despierta para bajar del auto y no emito siquiera sonidos. Entramos y fui a sacarme el traje que llevaba, me coloque un vestido y seguido de eso entraron ellos a cambiarse.
 
Me recosté en la cama y cerré mis ojos, no iba a dormir, solo aumento mis ganas de llorar y mi odio hacia Cattus se incremento, mi ira tenia la valentía de enfrentarlo ahora y golpearlo hasta que se desangre.
 
Avy se acerca y me tira de la cama para que me levante, la miro confundida y salimos fuera. A lo lejos pude ver que os dirigíamos a un circulo en donde estaban todos riendo y bebiendo alcohol.

Genial, ideal para ahogar las penas Bo.

Cuando note su intención, deje que me llevara corriendo al circulo, nos sentamos una al lado de la otra y senti un brazo posarse en mi hombro, era Tomas, me acerco un vaso de lo que sea que estaban bebiendo y lo bebí quemando mi garganta.

Comenzamos a jugar ‘Yo nunca nunca’ y eso destruyo mi poca cordura.

 
—Yo nunca dormí con dos a la vez. O sea un trio.

 
Ya no sabia quien dijo eso, pero fui la única que bebió llevándome la atención de todos. Era mi séptimo vaso de ese liquido del infierno.

 
—Amatista, cuéntanos todo.

—Si recordara —la lengua la sentía algo entumecida y eso me causaba gracia.

 
Cambiamos de juego, colocamos una botella en medio y los besos comenzaron a repartirse entre todos, hasta me bese con Avy, no entiendo en que momento la botella llego a mis manos y ya lo sentía como agua. La botella giro y me apunto de nuevo, la gire para ver a quien debía besar y apunto a Tomas, me reí y lo tome besándolo con euforia. Pude ver confusión en sus ojos pero me siguió el juego haciéndose largo el beso, me subí encima de el y me levanto del suelo llevándome al camper y ahí se separo.

 
—Ama, no te hagas esto.

—Bésame Tomas —lo exigí atrayéndolo a mi.

—No tendría problema en hacerlo si no estuvieras enamorada de otra persona.

—El ya tiene a otra —comencé a besarlo en su cuello y entramos, pero me llevo a la ducha fría.

—Bogdana —su tono de voz cambio a una mas ronca y tomo de mi rostro para que lo mire—. El no sabe que estas viva, ponte en su lugar y no hagas mas esto.
 

Me baja y me coloca debajo de la ducha. Sale de la pequeña tina y comienzo a llorar.

 
—¿Puedo pedirte algo? —le pregunto antes de que saliera. El asiente— ¿Puedes quedarte mientras me ducho?

—Esta bien —se voltea y comienzo a sacarme la ropa ya mojada.

—¿Puedes mirarme?

—Bogdana —se queja y las lagrimas comienzan a bajar de mis ojos.

—Mírame  —le pido con un hilo de voz. Tomas se gira y me mira directo a los ojos— ¿soy fea? —como si supiera a que me refiero, Tomas suspira.
 
—¿Qué te atormenta?, Ama eres hermosa ¿si?. Entiendo el dolor que sientes, pero no te hagas daño pensando en que no eres linda.