💚🖤Un Luminoso Comienzo🖤💚

Esperanzas

Después de conocer la historia, Susie se quedó unos días más; si bien bromeó y se divirtió con Lancer y la Reina tratando de cocinar ácido de Batería, también tuvo momentos para probar algo que la inquietaba: ¿Ralsei como Lancer, fuera del Mundo Oscuro, se volverá un objeto? Su respuesta fue tan asombrosa como emocionante, pero aún así no podía consolar del todo a su amigo.

-Ya no voy a esperar más, maldita sea, traeré yo misma a Kris, aunque tenga que llevarlo por la fuerza...-dijo con extrema rudeza.

Pero no fue necesario.
Sin esperar, justo a la salida, se encontró con el humano, dándose el valor para entrar.

-¡¿Qué demonios haces aquí?! Kris, si quieres saberlo, todos allá están bien.

-Ralsei...-Kris no hallaba más palabras y solo pronunció su nombre.

-¿Nuestro amigo? Bien, aunque quiere contarte una historia interesante ¿Quieres que te acompañe, bebé introvertido?- respondió burlescamente, aunque por dentro quería golpearlo.

-No...- Si bien la respuesta fue corta como siempre, parecía profundamente decidido, ya que él brillo de sus ojos traspasaba los mechones de su pelo, dándole un aspecto sombrío y extraño.

-¿Ok?, amigo... solo no hagas esa cara cuando veas a Ralsei. Da un put0 miedo que te cag4s...- respondió gruñendo - nos vemos.

Kris había repasado la situación que pasaría a continuación una y otra vez. En esta ocasión el también hablaría. Con paso firme, caminó sin saludar a nadie hasta llegar al tercer piso del castillo, a la habitación del príncipe.

Ralsei sintió su presencia y se escondió tras la puerta. Estaba muy arrepentido de sus últimas palabras para su amigo, y el tiempo no había ayudado. No sabía como iba a mirarlo.

Kris, cual caballero llamado al salón del trono, se arrodilló a la entrada de su habitación, como si se preparara para una investidura. Eso alertó a Ralsei, que algo confundido lentamente se alejó de su escondite y se acercó a él, aunque sin dejar de mirar al piso. De reojo pudo observar como el cabello del humano, caía a cada lado de sus mejillas, ocultando por completo su rostro.

-Quería verte...

Sin dudarlo quería hablar. Tenía la esperanza de ser sincero y esta vez sin ser presionado por nadie ni nada más, pero sintió como volvía a paralizarse.-"Rayos, no puedo"- aseguró en su mente. Quedó estático en esa posición esperando que su amigo dijera algo. Ralsei, que ya entendía como funcionaban las formas de su compañero, comenzó a hablar:

-Te extrañé mucho, Kris... creo que me precipité demasiado ese día, pero no quería perder esa oportunidad para poder apreciar tus verdaderas emociones y decirte lo que siento, pero creo que me olvidé de algo realmente importante- Ralsei lentamente subió la mirada hasta llegar a la cabeza del humano...

-Yo soy tu primera creación, Kris. El primero que despertó por el poder de tu determinación.