💚🖤Un Luminoso Comienzo🖤💚

Despedida

El salón del trono era una habitación amplia y oscura. Una alfombra azul recorría desde la entrada, hasta un gran trono decorado con la Runa Delta. Varias antorchas celestes alumbraban el camino, y detrás de todo eso, emergía con majestuosidad el gran pilar oscuro de la Fuente Primigenia.

Todos estaban ahí, como si se tratara de una procesión esperando a cada lado, haciendo un pasillo. Contra todo pronóstico, todos se veían muy felices. No todos hablaban, pero su mirada era cálida y comprensiva.

Ralsei fue el primero en pasar, saludando tiernamente a todos y cada uno, diciéndoles que sea lo que sea que suceda, estaba feliz de haberlos acogido, que los apreciaba mucho y siempre estarían juntos. Terminando su discurso, se sentó cuidadosamente en el trono, esperando por sus amigos.

Susie fue más brusca, aunque como estaba sensible, no dudó en abrazar a todos, empezando por su mejor amigo Lancer, que se abalanzó a su espalda y le pidió que nunca jamás se olvidara de él. Dio un cálido apretón de manos inclusive a Trashy, que siempre guardaba comida deliciosa para ella, cuando no tenía donde dejarla. Lentamente se incorporó y se ganó a la izquierda del trono, esperando por el último compañero.

Kris quedó estático. Apenas cruzó el umbral, vio como el pilar oscuro comenzó a brillar, dando una nueva luz al salón y haciendo que la muchedumbre gritara maravillada. Él no era tan extrovertido, por lo que simplemente miró a todos, les deseó buena suerte en donde quiera que vayan y les dijo que el mayor anhelo de su alma, era darles un final feliz. Terminando de pasar por el pasillo, se arrodilló ante el trono de Ralsei, pidiendo de forma muy formal, su permiso para sellar la fuente, y terminar la historia.

Ambos amigos y compañeros se batalla, se acercaron a él y lo abrazaron dándole ánimos.

- Al igual que tú, odio esto, pero si es necesario para salvar al mundo en donde estás tú y Noelle viviendo, vale la pena. Te veré en la escuela, Kris. Eres el mejor imbécil que he conocido. Gracias por acompañarme en esta aventura... Si necesitas a una amiga, siempre estaré contigo en el Mundo de la Luz.- dijo ella, apoyando su mano en el hombro del humano

- Kris... -Ralsei comenzó hablando suavemente, tratando de mantener la firmeza de sus palabras- Aún cuando no me veas, estaré contigo, como desde el día que, como niño, me diste ese propósito. Fue la mayor bendición poderme encontrar contigo de nuevo, compartir nuestra aventura y confortarte cuando estabas sucumbiendo. Por favor, piensa en mí y sigue siendo tan fuerte y valiente como siempre. Te amo.- Ante la vista de todos, con mucho sonrojo, besó la frente de su amado humano creador, quien lo abrazó entrañablemente de vuelta, apretándolo contra sí.

El joven caballero suspiró hondamente y se dirigió frente al pilar de luz. Sus amigos le siguieron, cubriendo sus espaldas. Notó la pesadez en su alma y tanto sus ojos como su corazón empezaron a brillar.

Sintió como su alma se elevó y fusionó con el pilar, quien lo cegó por unos minutos. Tras eso, la Fuente Primigenia y Castle Town desaparecieron en medio de la oscuridad.

Al abrir sus ojos de nuevo, se encontró con Susie, que se hallaba dormida sobre el suelo del armario, aunque no tardó en despertar sobresaltada.

Miraron a ambos lados y descubrieron con pesar y nostalgia que aquel lugar, ese antiguo pasadizo hacia lo desconocido, volvía a verse común y corriente.