𝑬𝒍 𝒑𝒆𝒄𝒂𝒅𝒐 𝒅𝒆 𝑻𝒊𝒛𝒊𝒂𝒏𝒐 [Completa]✔️

Capitulo 04-RED

Adkin está aquí, necesito saber que parentesco tiene con esta gente. Busco en mi maleta y tomo un top crop negro, una falda de cuadros que combino con mis botas altas. Peino mi cabello hacia atrás con una diadema y bajó las escaleras, caminando como una modelo de Victoria Secret.

Desde el pasillo logró ver la habitación del comedor. Es una mesa pequeña de cristal con apenas seis asientos. En dos de ellos Adkin y Analia están sentados ya. Ella le enseña unos documentos que él revisa con su cara más sensual, la de iceberg.

Cruzó el pasillo sin hacer ruido hasta la cocina buscando a mi chef. Carlo es el mejor cocinando, sonrío cuando el aroma de mi platillo favorito me inunda los poros.

—Por fin algo decente en esta casa. Sírveme ya que muero de hambre.

—Claro que si mi niña, de inmediato.

Anna entra y me observa. Mira con asombro todo lo que mi chef tiene listo, incluso mi postre favorito, seguro jamás ha visto esta clase de comida.

Me observa de arriba abajo y es obvio que mi outfit no es de su agrado, eso me saca una pequeña sonrisa de los labios. En la escala puedo vestirme como me dé la gana, eso a mi padre jamás le ha importado.

—Danella. Me agradaría mucho que cenemos como una familia.

Río tomando un pedazo de sandía del plato.

—¿Una familia? Mire señora, yo no hago estas cosas, de cenar todos en una mesa y eso.

—Aquí cenamos en familia y espero que tú también lo hagas.

—Yo ceno en mi dormitorio.

Da un paso a mi intentando tomar mi mano se lo impido obligándome a retroceder. Carlo nos observa y deja de cocinar.

—Te pido un favor. Cena conmigo y mi familia, te gustara.

Niego.

Doy un vistazo atrás de la mujer de cabello rojo y ojos verdes. Su hija Y Adkin preparan la mesa, supongo que puedo hacer un sacrificio por él.

—¿Quién es el tipo que está en la mesa?

—Es un conocido de tu hermana, parece que están saliendo.

—¿Saliendo?

—Si, pues eso parece. La madre de Adkin y yo fuimos a la misma Universidad en Italia y cuando se mudo aquí sus visitas son constantes.

¿Saliendo? Sale con esa insípida y se muestra hostil ante mi. Que clase de idiota es, bien dice mi padre que entre mugres se atraen. La cólera se me sube a la cabeza y la obsesión por que caiga por mi aumenta. Cada cosa nueva que descubro de este tipo me vuelve más loca que antes y no en el buen sentido.

—Ok. —respondo luego de hacer una pausa—. Carlo lleva mi cena a la mesa.

Sigo a la mujer, es alta y delgada. Siempre mantiene una sonrisa estúpida en el rostro y voz es amable todo el tiempo. La culpa es lo que la hace actuar así.

Me ofrece la silla frente a Tiziano. Quien en cuanto me ve no disimula la sorpresa en su rostro terminó mi trozo de fruta dándole una mordida lenta y provocativa, con mis ojos en él.

Christian corre la silla para que me siente, se acomoda a mi lado, Analia está junto a Adkin y Anna se acomoda a un lado. Marco sirve la cena para todos y me consiente dándome mi comida especial, todos me observan en silencio. Tomó la servilleta y la acomodo en mi regazo, mi chef deja los cubiertos para cada plato a mi lado y como con delicadeza. Los otros toman tenedores y comen.

—Adkin ella es Danella, mi hija.

—¿Hija? —pregunta sorprendido.

Me observa de arriba abajo sin el más mínimo pudor o disimulo desde que llegué no hace otra cosa.