FÉLIX
-Félix, ¡Félix!
-¿Qué pasa?
-Despierta, ya son las once de la mañana.
-Vale, ya me levanto, solo cinco minutos más.
-No, siempre dices eso.
-Te lo prometo, solo cinco minutos.
-Bueno vale. En fin, te voy a contar lo que iba a decirte. Me he comprado una pulsera con la bandera homosexual y también llevo una camiseta de lo mismo.
-Que guay, Hyunjin. La pulsera y la camiseta son bonitas. Por cierto, tienes que ir a comprar el pan.
-¿En serio?
-Y tan en serio. No hay pan.
-Joder. Pues no queda otra. Vuelvo en diez minutos, pequitas.
-Vale, cuídate.
-Sí, adiós. Te quiero.
-Yo más.
~Hyunjin salió y se dirigió a la panadería, pero casi llegando un grupo de chicos de aproximadamente treinta años, le pararon.~
HYUNJIN
-¿Y esa camiseta?
-¿Le pasa algo?
-Mejor dicho, ¿qué no le pasa?
-Pero qué le pasa. No entiendo.
-La bandera que tiene es horrenda.
-A mí me parece bonita.
-¿Bonita? ¿Acaso eres maricón?
-No soy maricón, soy homosexual.
-Como si me importara. Es lo mismo.
~Hyunjin intentó irse.~
-Ey, ey, ey, ¿a dónde vas?
-¿Tenéis algún problema conmigo?
-Muchos, amiguito.
-Dejad que me vaya y listo.
-No, mariquita de mierda.
(...)
