adhara 'norman'

14 | Te amo.

0.14;; capitulo catorce.

──. . . N-norman. . .

La voz debil de la chica resonó en el cuarto.

── ¿P-porque... ? ── pronunció nervioso.

── mi culpa. . .

Norman se acercó mas a la albina para poderla escuchar mejor.

── Fue en la primera dosis, algo salió mal y desde entonces eh estado tociendo. . .

── ¿Porque no me lo dijiste? ── preguntó, un poco decepcionado de si mismo por no darse cuenta de lo mal que estaba aquella chica de ojos rosa cual zafiro.

── Lo único que quería era vivir por un momento algo como en los libros de los orfanatos, algo mágico, contigo. ── contó, arrepentida se sus decisiones al ver la cara de tristeza de Norman.

El albino se acercó alarmado y preocupado a la chica quien empezo a tocer con flema y con ello mucosidad en un tono carmesí, se limpió en su bata y volvio a ver al albino.

Estaba realmente preocupado, veia a la chica realmente palida, sus labios se encontraban blancos, su respiración era pesada y unas no tan notable ojeras debajo de sus ojos.

Adhara extendio su mano para que el chico la sostuviera lo cual el la aceptó dándole un apreton.

── Lamento no poder tener esa cita contigo. ── su respiración era cada vez mas pesada y los pitidos de la máquina que monitorea sus latidos y respiración se empezaba a volver tediosa por el constante sonido.

Norman negó rápidamente, realmente, realmente sabía que si aquella chica que amaba con todo su corazón se iba, el caeria en un agujero tan profundo que no sabria si saldria vivo de ahí.

Porque con Adhara lo tenia todo, no le hacia otra cosa, mas que ser feliz y ya lo era, si ella esta asu lado el era feliz sin importar en el mundo en el que les tocó conocerse y vivir.

Las respiraciones de la chica eran cada vez mas pesadas con forme avanzaba los minutos.

── Norman. . . ── aun asi le llamó.

── ¿Si?

── Me encantó conocerte. . . ── pronunció tan lento que Norman sintio que se destruía por dentro al escuchar el esfuerzo de Adhara para hablarle.

── Ah mi también, ah mi también. . . ── sus ojos se empezaron a humedecer.

La habitación se empezaba a oscurecer y el cuarto se empezaba a enfriar.

── Adhara, recuerdas lo que te dije antes de la dosis... ── su voz se empezaba ah entrecortar, mas no se quería romper ahí.

── Si. Lamento no poder ir. . . En verdad, lo siento. . . ── Adhara solto unas lágrimas, al saber que no pudo cumplir tres cosas, uno; Tener una cita con el, dos; ir aquella ventanilla donde se declararon su amor, y tres; no poder hacerlo feliz como ella queria.

── Te quería decir lo que yo siento por ti... ── no aguanto mas y derramo lentas lágrimas que bajaban por sus mejillas. ── yo. . . Yo estoy jodidamente enamorado de ti, cuando te veo inexplicablemente soy tan feliz, cuando te veo sonreír deseo poder enmarcar aquella sonrisa que me vuelve loco y conservarla por el resto de mi vida, y cuando te veo a los ojos me pierdo en ellos como si de una galaxia se tratase. . . Yo estoy enamorado de ti. ── sus planes se rompieron al verla tan indefensa en la camilla, tan debil, anhelaba un futuro con ella a su lado.