Take it Off {L.S} | BDSM

CapÍtulo XII

"I don't like anyone better than you, it's true".

La alarma sonó avisando que un nuevo día estaba por comenzar.

7a.m

Odiaba los lunes.

-5 minutos más, por favor - rogó Louis entre sueños acercandolo aún más a él- odio los lunes.

Harry rió ante el odio mutuo que sentían por el día.

-Lou - se giró hacia el mayor y posó su muslo sobre su cadera - Debemos levantarnos.

-No - dijo escondiendo su rostro en el cuello del rizado - Quiero quedarme aquí.

-Tenemos que ir a trabajar.

-Tú me deberías mantener - resopló cerca de su oreja provocando cosquillitas. 

-Me siento estafado - rezongó el rizado - Así no se supone que sería.

-¿Alguna queja de su parte, Mr. Styles?- Louis acorraló a Harry en la cama quedando encima de él y con las manos del rizado aprisionadas a cada costado.

-Me prometieron un sugar daddy y resulta que yo lo tengo que mantener - bromeó haciendo un puchero con sus labios.

-Yo no soy tu sugar daddy ,Harry- mordió el labio inferior del ojiverde- Soy tu amo, y tu amo te ordena que vayas a ducharte.

-¿Y si no qué? - lo retó.

-Conocerás el apéndice 7 del contrato, los castigos - besó su mandíbula marcada.

-Quizás los quiero conocer.

-¿Estás seguro de eso? -inquirió acariciando su rostro, dibujando con su índice los labios del rizado.

-Muy segur... - el celular de Harry vibró en la mesita de noche. Louis lo dejó en libertad apoyándose sobre la almohada, siguiendo sigilosamente cada movimiento de su sumiso.

Apoyó sus pies en el frío piso tomando el aparato.

Pronto, sintió como su amo dejaba un caminito de besos desde la parte superior de la espalda hasta el centro.

-Mmm- ronroneó.

Un segundo mensaje llegó haciendo que centrara su atención en el aparato, leyendo el mensaje.

De Ni:

Paso por ti a las 8:00 am.

xoxo Edu.

De Ni:

Despierta a ese flácido trasero!

Escribió una rápida respuesta y volvió a dejar el celular en la mesita.

-Ve a ducharte - mordisqueó la espalda del ojos color jade.

-Como usted ordene, amo.

Fue camino hacia el baño y cerró la puerta. Se despojó de su pijama, abrió el grifo y dejó que el agua lo cubriera.

La ducha era un buen lugar para pensar ¿No? Sus pensamientos fluían como el agua. Lo que Louis había hecho por él ayer tenía gran importancia.

Probablemente para el ojiazul solo significaba cumplir con esa parte del contrato, ya saben, de los cuidados y tratos. Pero para Harry, sin duda, fue un gran apoyo.

Con John no podía desahogarse pues tendía a minimizar sus problemas,Louis muy por el contrario, lo alimentó y le hizo mimitos hasta que se durmió.

La verdad eso fue un bálsamo para su alma herida. Por primera vez en años , sintió que no era solo él contra el mundo, sino que ya tenía un compañero para librar las batallas.