DÉJALO IR ...

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Kisaki se había levantado al oír sonar la alarma de su celular, se preparó para ir a la escuela y cuando salió de su casa se encontró con takemichi. Desde aquel día en el cual takemichi había faltado a su paseo semanal algo había cambiado, no es por que a el le molestase que su mejor amigo conociera a mas personas ni por que tuviera algo en contra de manjiro, pero ... Se sentía solo, hecho a un lado, como si fuera la persona que sobraba entre takemichi y manjiro.



Ese sentimiento era algo nuevo para una persona que prácticamente había crecido al lado de takemichi viendo sus mejores y peores momentos, prácticamente se conocían desde que eran unos bebes, cuando ambos entraron a la primaria, en sus fiestas de cumpleaños cuando acababan hechos un desastre de tanto azúcar que ingerían, las veces que iban a la playa con sus hermanos, cuando Ran y Rindo les enseñaron a montar bicicletas y terminaron con raspaduras en las piernas y manos, el terror que sintieron cuando los hermanos de takemichi los olvidaron en el centro comercial y la satisfacción cuando regañaron a estos con la madre del de ojos azules, pero también estuvo cuando en la secundaria les hacían bullying, en cómo empezó a practicar taekwondo y le enseño algunos movimientos a takemichi para protegerse de los abusivos, las primeras novias que tuvo el peli-negro, pero lo que le había dolido a kisaki fue cuando takemichi se había enamorado perdidamente en su primer año de prepa de una chica mayor que él.



La manera tan humillante en la que esa chica había jugado con el corazón de su mejor amigo desechándolo como si fuera un trozo de basura, la manera tan deplorable en la que se había encontrado su amigo le hacia sentir tan impotente ante la situación como si fuera a él a quien le hubieran hecho aquello ... ¿Pero por que exactamente se sentía así? La respuesta era muy simple, el estaba enamorado de takemichi desde siempre y al ver a su amigo de esa manera sentía que su corazón era aplastado lentamente, cuando finalmente después de muchas dificultades había logrado que takemichi volviera a ser el mismo de antes el de lentes se sentía feliz por él, aquella era su naturaleza, cuidar de takemichi, por que al final del día kisaki siempre soñaba con contarle sus sentimientos a el peli-negro.



Pero sospechaba que nunca podría hacerlo.



"He aprendido a atesorar los recuerdos que forjamos con el tiempo ... Aun si te pierdo, siempre podre verte en ellos y sentir esa calidez que me hace llorar..."



Las sospechas de kisaki por lo que sentía su amigo era reales, takemichi veía al rubio con aquellos ojos tan brillantes con los que le veía el, aquellas sonrisas tan hermosamente deslumbrantes que se posaban en su rostro eran causadas por el rubio, y aunque su amigo no pudiera sonrojarse sabia cuando se encontraba nervioso, nervios que el de lentes sabia leer y una vez más eran provocados por el de cabellera dorada. Aunque quisiera negarlo con todo el poder del mundo sabía muy adentro de su ser que el corazón de takemichi no era ni pertenecía a el y aquello desgarraba su ser como una tormenta que arrasaba con todo a su paso dejando escombros a su término.



"Ahora entiendo lo que aquel ángel sintió al enterarse que el corazón de su amado le pertenecía a aquel príncipe de ojos morados, pero hay una gran diferencia entre nosotros y es que el decidió seguir intentando tener un lugar en aquel corazón y yo ... Decidí ocultar mis sentimientos por que ya tengo un lugar en el suyo, pero no de la forma que quisiera"

BLESSED SIN ||  MT || EN PAUSADonde viven las historias. Descúbrelo ahora